Conducir una moto en España no solo es una cuestión de libertad, sino también de responsabilidad y formación. Y, para garantizar la seguridad tanto de los motoristas como del resto de usuarios de la vía, la Dirección General de Tráfico (DGT) establece un sistema de permisos escalonados que regula qué tipo de motos puede conducir cada persona, en función de su edad, experiencia y formación.
Este sistema está compuesto por 4 distintos tipos de carnets: AM, A1, A2 y A. Cada uno permite conducir motos de diferentes características y exige superar pruebas específicas.
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El sistema de carnets de moto en España está diseñado para ofrecer un acceso progresivo y seguro al mundo de las 2 ruedas. Desde los ciclomotores hasta las superbikes, cada carnet y moto requiere de formación específica y compromiso. Pero, lógicamente, también abre la puerta a nuevas sensaciones de libertad, aventura y movilidad. Eso está claro.
Ya sea empezando con un ciclomotor, una naked, o con una gran turismo para recorrer Europa, lo más importante es, sin duda, formarse bien, practicar con responsabilidad y disfrutar de la carretera con respeto. Ahora, si estás pensando en sacarte el carnet de moto, obtener otro permiso superior, o simplemente deseas entender mejor cómo funciona la normativa actual en España, aquí os ofrecemos una guía completa y actualizada.
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Carnet AM: el primer paso.
El carnet AM es el más básico de todos y permite conducir ciclomotores de hasta 50 cc. Se trata de vehículos con una velocidad máxima limitada a 45 km/h, que suelen usarse en entornos urbanos o rurales para desplazamientos cortos. También están incluidos en este permiso los ciclomotores de tres ruedas y los cuadriciclos ligeros, como los microcoches.
Este permiso se puede obtener a partir de los 15 años, aunque hasta los 18 no está permitido transportar pasajeros. El proceso para conseguirlo no es complicado: consta de una prueba teórica específica sobre normativa relacionada con los ciclomotores y una práctica en circuito cerrado, donde se evalúan habilidades básicas como mantener el equilibrio, frenar con precisión y realizar giros controlados.
El coste varía entre los 250 y los 400 euros, dependiendo de la autoescuela, y es una opción habitual entre adolescentes o personas que no necesitan más potencia en su día a día.
Carnet A1: acceso a las motos de 125 cc.
El permiso A1 es el siguiente escalón y permite conducir motocicletas con una cilindrada máxima de 125 cc, una potencia de hasta 11 kW (equivalente a unos 15 cv) y una relación potencia/peso no superior a 0,1 kW/kg. También autoriza a conducir triciclos de motor de hasta 15 kW (20,1 cv).
Se puede obtener a partir de los 16 años y requiere la superación de 2 pruebas teóricas (una común sobre normas de circulación y otra específica de moto) y dos exámenes de moto prácticos: uno en circuito cerrado (maniobras técnicas como el zigzag, frenadas de emergencia o equilibrio a baja velocidad) y otro en circulación abierta por vía pública, donde se valoran las habilidades del aspirante en condiciones reales de tráfico.
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Una particularidad del A1 es que quienes ya poseen el carnet de coche (B) desde hace al menos 3 años están autorizados a conducir motos de hasta 125 cc sin necesidad de realizar ningún examen adicional. Esta medida fue implantada en 2004 para facilitar la movilidad urbana, y ha provocado un aumento significativo de los scooters en ciudades como Madrid, Valencia o Barcelona. No obstante, esta convalidación no equivale a tener oficialmente el carnet A1, lo cual puede ser relevante si se desea avanzar hacia el A2 o alquilar motos fuera de nuestro país.
El precio del carnet A1, si se realiza desde cero, oscila entre los 500 y los 800 euros, dependiendo del número de clases prácticas contratadas y de si se aprueba a la primera.
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Carnet A2: la puerta a las motos de media cilindrada.
El carnet A2 se introdujo en España en 2009, en cumplimiento de la directiva europea 2006/126/CE, y permite conducir motos de hasta 35 kW de potencia (unos 47 cv), siempre que no superen una relación potencia/peso de 0,2 kW/kg. También se aceptan motocicletas limitadas que no superen sin limitación los 70 kW (95 cv).
Este carnet está pensado para usuarios que quieren conducir motos de mayor cilindrada sin llegar aún a las potencias más elevadas. Es el más popular entre quienes acceden por primera vez a motos de marchas, naked, trail o deportivas de gama media como la Kawasaki Z650, la Honda CB500X o la Yamaha MT-07 (limitada).
Para obtener el A2 hay que tener al menos 18 años. El proceso es similar al del A1, con exámenes de moto teóricos (común y específico) y dos pruebas prácticas, una en circuito cerrado y otra en circulación. Aunque algunas personas acceden directamente al A2 sin pasar por el A1, se recomienda familiarizarse con una moto de 125 cc antes de dar el salto.
El precio varía bastante: entre 600 y 1.000 euros, dependiendo del número de clases necesarias, que en este caso suelen ser más porque las motos son más pesadas, tienen marchas y requieren un dominio más técnico.
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Carnet A: para todas las motos sin restricciones
El carnet A es el último nivel y permite conducir cualquier tipo de motocicleta, sin límites de potencia ni cilindrada. Para acceder a él es necesario cumplir dos condiciones: tener al menos 20 años de edad y haber sido titular del A2 durante un mínimo de dos años. Es decir, no se puede obtener directamente desde cero.
A diferencia del resto de permisos, no requiere un examen práctico o teórico tradicional. En su lugar, se debe realizar un curso de formación obligatoria de 9 horas en un centro autorizado por la DGT. Este curso se divide en tres bloques:
- 3 horas de formación teórica, que abordan aspectos de seguridad, equipamiento y conducción defensiva.
- 4 horas de prácticas en circuito cerrado, centradas en maniobras avanzadas.
- 2 horas de prácticas en circulación abierta, bajo la supervisión de un instructor.
El carnet A es el más sencillo de obtener una vez se tiene el A2, pero también es el más exigente en términos de madurez y responsabilidad, ya que da acceso a motos de gran cilindrada como las Yamaha R1, BMW R 1300 GS o Ducati Multistrada V4.
El precio del curso ronda entre 250 y 400 euros.
Como todos nos podemos imaginar, el coste de sacarse un carnet de moto en España no es uniforme. Depende de múltiples factores, como la comunidad autónoma, la autoescuela elegida, las tasas oficiales, y, sobre todo, el número de intentos necesarios para aprobar. Eso sí, las tasas de examen de la DGT en 2025 se sitúan en 94,05 euros por convocatoria, incluyendo una primera oportunidad para cada tipo de examen (teórico, circuito, circulación).
A esto hay que sumar el precio de las clases prácticas, que suelen costar entre 30 y 50 euros por sesión de 45 minutos. En muchos casos, especialmente en el A2, se recomiendan entre 6 y 10 clases como mínimo para presentarse.
Antes de decidir qué carnet de moto se necesita, conviene reflexionar sobre el uso que se le va a dar a la motocicleta.
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Si solo se busca una solución económica para la movilidad urbana, quizás baste con un scooter de 125 cc que se puede conducir con el carnet de coche. Pero si el objetivo es disfrutar del mundo de la moto en carretera, viajar o incluso realizar rutas por montaña, merece la pena plantearse un A2 o incluso, a medio plazo, el carnet A.
También es recomendable buscar una autoescuela especializada en motos para superar tus exámenes de moto. Muchas cuentan con instructores que son motoristas en activo y ofrecen un enfoque mucho más técnico y realista de la conducción. Además, algunas disponen de motos modernas y buenos equipos de protección, lo que puede marcar la diferencia en la experiencia de aprendizaje.
