Kevin Schwantz no ha sido el piloto más exitoso de todos los tiempos. Si repasamos su palmarés vemos que “solamente” tiene un título, el de 1993. Pero la realidad es que solo la mala suerte le quitó algún título más porque lo que es ganar carreras, lo hizo tanto como su principal Rival, Wayne Rainey.
De hecho las estadísticas de ambos son increíbles y es que el bueno de Kevin solamente corrió 105 Grandes Premios, sin duda eran otros tiempos, y logró 25 victorias, 26 vueltas rápidas, 29 poles y un total de 51 podios. El porcentaje de éxitos en una era muy diferente a la actual es increíble.
Estamos seguros de que aunque Kevin no hubiese logrado el título sería igual de respetado y de querido, pero también de que no hubiéramos podido disfrutar de esta edición especial de la Suzuki GSX-8S que ha preparado Suzuki Italia.
Precisamente conmemora los 30 años desde que venciese su único título y es por eso que no vemos ni rastro del color azul en el que hemos conocido esta bicilíndrica de Hamamatsu, sino que recurre al rojo y blanco tan característico de aquella RGV-R 500.
En cuanto a la diferencia con el modelo de serie, se basa únicamente en replicar la estética de la moto de Gran Premio con las gráficas y añade la tapa del asiento trasero que la convierte en una monoposto para darle ese toque más de carreras.
Lógicamente, incluye el mítico 34 en el lateral de la moto y es una decoración que está hecha con tanto mimo que a pesar de la diferencia de tiempo y del tipo de moto ha sabido captar a la perfección la esencia de lo que fue la moto de carreras.
La Suzuki GSX-8S Kevin Schwantz no es barata…
La mala noticia es que solamente van a producirse un total de cinco unidades y lo hará Suzuki Italia. Si estuvieras interesado, también has de saber que la reserva es de 500 euros y el precio final de 11.490€, es decir es mucho más cara que la versión original.
Por ahora hay dos unidades vendidas y quedan otras tres. Si Suzuki no consigue vender las cinco unidades, el plazo para el cierre de la venta acabará el 30 de septiembre. Aunque lo curioso es que no solo han sacado la versión de la GSX-8S, sino que también hay un motor fueraborda y un Suzuki Swift edición Kevin Schwantz y también con cinco unidades cada uno.
Por cierto, fue el propio Kevin el que estuvo presente en la presentación de esta decoración tan especial que tuvo lugar en la Autolook Week Torino y en la que se le pudo ver subido a la Suzuki que, durante años, hizo que la afición española lo llamara cariñosamente “el Pepsicolo”.
