Puede que suene a contraste eso de que las motos eléctricas busquen récords de velocidad, pero es algo que pasa. En esta ocasión la protagonista es un scooter eléctrico de 200 CV que se llama Velocifero y que está hambrienta de récords.
En realidad, como la moto es un elemento inanimado, el que está en busca de récords es Alexander Tartarini. Cuenta con un apellido ilustre en esto de los récords de velocidad y es que busca emular a su padre, Leopoldo Tartaraini.
En 1969, Leopoldo se lanzó a la aventura de los récords de velocidad. En aquella ocasión no era un scooter eléctrico de 200 CV sino un motocarro propulsado por un motor de CZ.
Pero la historia de Leopoldo todavía es más espectacular. Tras un duro accidente que a punto estuvo de costarle la vida y la movilidad y que, finalmente, solo le costó la carrera deportiva, se embarcó en un viaje.
Comenzó la vuelta al mundo en una Ducati y acabó por crear Italammeezeta, marca que finalmente terminó por convertirse en la Italjet que todos conocemos y de la que hemos podido disfrutar con su Dragster.
Precisamente el desafío de Alexander tiene que ver un poco con los dragster, las carreras de aceleración y es que se enfrentará con su propio scooter, el Velocifero, a una carrera de aceleración.
Un scooter eléctrico de 200 CV que busca batir tres récords
La Federación Italiana de Motociclismo será quien se encargue de verificar la velocidad máxima, velocidad por kilómetro y la aceleración de cero a 100 km/h. Por si todo esto no fuera especial, Alexander se subirá a su scooter eléctrico de 200 CV en el mismo trazado que su padre, el Circuito de Monza.
La cita es este próximo 30 de junio y podrá seguirse a través de la propia web de Velocifero. Además, aunque la moto es la punta de lanza, detrás hay una marca de motos eléctricas y patinetes propiedad del propio Alexander.
