Hemos visto que la Triumph Tiger 800 XCx se comporta fenomenalmente fuera del asfalto y su tricilíndrico puede sacar pecho a la hora de demostrar de tú a tú sus capacidades en terrenos difíciles. Pero para ir un paso más allá y ser verdaderamente imparable incluso en el más duro invierno, nada mejor que esta conversión de la que sale la Triumph Tiger 800 Ice Bike.
Ojo que no se han limitado a quitar la rueda delantera y poner en su lugar un patín sino que detrás ha habido un gran trabajo de desarrollo e ingeniería pues si os fijáis con atención, la horquilla invertida monta al mismo tiempo un muelle externo que permite además de absorber las irregularidades en sentido vertical, permitir que el patín delantero oscile y pueda leer a la perfección el perfil de la nieve.
Por supuesto era también imprescindible mejorar la tracción y para ello el neumático trasero cuenta con unos generosos clavos para poder transmitir la potencia a la nieve. El escape también es de nueva factura, muy corto y con salida lateral además de estar perfectamente protegido bajo un cubre cárter.
Como por el invierno la luz escasea, no llegaremos muy lejos si no podemos ver así que se le ha dotado además de una protección para el foco original, varias luces adicionales tanto encima de los conocidos faros auxiliares como bajo el guardabarros que al igual que el trasero han sido recortados.
A nivel de instrumentación, incorpora un medidor de temperatura externo además de un sistema GPS para saber dónde vamos… o para que vean de dónde venimos por si no nos creen. Y por supuesto, un mini kit de supervivencia imprescindible en la nieve: una pala y un hacha para hielo, plegables y montados en un soporte específico en la parrilla trasera.
