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Yamaha RD400 by Roland Sands Design

"2T de diseño" de esencia añeja Old School

Fotos: Pipe Burn
Poco más se puede añadir a la extensa y próspera trayectoria de Roland Sands Design. Ahora, haciendo uso de su dilatada experiencia, ha convertido una arcaica RD400 en toda una obra de arte andante.

Llevar a buen puerto un proceso restmod empleando una Yamaha RD400, solo está al alcance de genios del sector, como puede ser el caso de nuestro protagonista, Roland Sands Design (RSD). Y si no echar un ojo a esta maravilla que hoy os mostramos y que, particularmente a los amantes de las 2T, seguro que ya les ha producido un flechazo instantáneo. Hablo desde la pura experiencia personal, porque aquí un servidor aún sigue ojiplático con esta preciosa preparación.

La misma que hemos conocido gracias a los compañeros de Pipe Burn, que han conversado con Roland, largo y tendido, sobre este proyecto de RD400. En cualquier caso, si aún no conoces los trabajos de RSD, por aquí os dejamos algunos de sus últimos trabajos que hemos tratado desde la redacción de SMN:

Yamaha RD400 by Roland Sands Design

Yamaha RD400 by RSD en detalle

Según parece, esta RD400 es propiedad de un amigo del propio Roland que, en homenaje a su hermano fallecido, amante de las motos 2T, le encargo al equipo de RSD una preparación al más alto nivel, empleando como base a la mítica montura japonesa. Roland comenta: “A todos nos encantan los dos tiempos en el taller. Hay algo en la simplicidad, el peso ligero, el sonido y el olor que nos sigue cautivando. Crecer rodeado de dos tiempos, reconstruir los motores y pre mezclar el combustible es algo que se te queda grabado.”

“Cuando escuchas uno, cuando hueles la premezcla quemándose en una proporción de 32 a 1, te transporta a una época más sencilla, una época anterior a que los teléfonos móviles y el mundo moderno se tragaran a los niños. Te lleva de vuelta a una época en la que tener una proporción correcta, una jarra de cinco galones de combustible y suficiente aceite para pasar el día era todo lo que importaba. Así que aquí estamos, retrocediendo en el tiempo con una RD400 construida, y se siente muy bien”.

Yamaha RD400 by Roland Sands Design

La moto llegó en muy mal estado al taller, con buena parte de su estructura desarmada y en cajas. Lo primer que se hizo fue sacar el motor bicilíndrico en paralelo de dos tiempos y 398 cc para mandarlo a reconstruir por completo. Además, se aprovechó esta tarea para mejorar la arcaica mecánica de la RD400, aumentando su compresión e incluyendo nueva caja de láminas, carburadores Keihin de 28 mm e instalando un sistema de escape ETD con silenciadores terminados en fibra de carbono.

Un nuevo sistema de embrague o la modificación de las relaciones de la caja de cambios, también forman parte de las modificaciones llevadas a cabo sobre esta encantadora Old School. Pero esto es solo el principio porque además se ha hecho un profundo trabajo en la parte ciclo, incluyendo:

  • Llantas de 17” Dymag
  • Neumáticos Dunlop Q5 aptos para circuito
  • Basculante de aluminio 6061-T-6 Trac Dynamics
  • horquillas Yamaha R6,
  • Abrazadera inferior R6
  • Tija superior RSD vintage
  • Amortiguadores traseros son totalmente ajustables
  • Pinzas radiales Yamaha
  • Discos Brembo
  • Esquema de color personalizado con gráficos Speedblock

Yamaha RD400 by Roland Sands Design

Roland termina comentando sobre esta RD400: “Originalmente íbamos a volvernos locos con la carrocería, pero después de pensarlo más, decidimos mantener el tanque original y eliminar el diseño del carenado superior y las modificaciones del tanque, manteniendo intacta la estética de serie con una sección de cola TZ750.”

Concluye: “En lugar del carenado, usamos un faro Indian FTR y un soporte masajeado. Esto nos permitió concentrarnos en los aspectos de rendimiento de la moto. Es significativo devolverle la vida a una máquina que es capaz de crear nuevos recuerdos y resucitar los antiguos. Es lo más cercano a una máquina del tiempo que podemos conseguir”.

Luar Guerbio
Luar Guerbio
Llevo media vida a vueltas con las letras y finalmente terminé donde siempre quise hacerlo, escribiendo sobre motor. Amante de todo aquello que huela a “Old School”, disfruto cada segundo sabiendo la suerte que atesoro de ser un incurable Petrolhead.

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