La CFMoto Vandal 450 es la colaboración entre dos titanes de las motos. Por un lado tenemos a CFMoto, marca que no necesita presentación, y que en los últimos años está avanzando para convertirse en una de las habituales entre las grandes, gracias al paraguas que le brinda en Europa el grupo KTM. Por el otro tenemos a uno de los preparadores más reputados de Estados Unidos y, también, del resto del mundo: Roland Sands Design.
Que una moto pase por el taller californiano implica que va a salir muy transformada, y no cabe duda de que si vemos la CFMoto Vandal 450 ya terminada puede que cueste reconocer de qué modelo de serie hablamos. Y es que sí, aunque no lo parezc,a es una CFMoto 450 MT, también conocida como CFMoto 450 Ibex en otros mercados como el estadounidense.
La CFMoto Vandal 450 se olvida por completo de su faceta offroad
Los cambios a los que se enfrentó la 450 MT para terminar siendo la CFMoto Vandal 450 comenzaron por las llantas, que perdieron su tamaño y características off road de 21 pulgadas delante y 18 detrás ambas con radios, para montar dos llantas de 17 pulgadas y de aleación, lo que la moto pase a ser totalmente asfáltica.
Pero el cambio de campo por carretera continúa con más modificaciones o, mejor dicho, deshaciéndose de algunos elementos que son necesarios cuando usas la moto fuera de la carretera. En ese sentido, la CFMoto Vandal 450 se desprende del guardabarros delantero bajo para poner uno elevado y elimina tanto el protector de cárter como la pantalla parabrisas, los paramanos y el portaequipajes.
Con este movimiento Roland Sands Design ya dejaría la moto prácticamente lista para el supermotard, pero lógicamente la cosa no queda ahí y han cambiado algunas plásticas más dándole un toque estilo dirt track con las placas laterales. También el asiento es nuevo y pierde su espacio para el pasajero, algo que confirma el hecho de que no tenga estriberas traseras.
Hablando de estriberas, incorpora unas nuevas mecanizadas y adaptadas a ese uso en carretera del que hablábamos, algo que queda reforzado por el amortiguador trasero y la colocación del depósito de gas. También el apartado de frenos se ha modificado y se han incorporado cubremanetas. Eso sí, el bicilíndrico sigue tal cual salió de fábrica.
Para rematar la preparación, que también incluye un nuevo sistema de escape con salida de silencioso abajo, tenemos la decoración estilo noventero con unas gráficas y juegos de colores que podrían ser perfectamente de la última década del siglo pasado.
Esa es la guinda del pastel de la CFMoto Vandal 450, una moto que, por desgracia, sabemos que no llegará a producción, aunque CFMoto no descarta usarla como inspiración para futuros modelos. Estaremos atentos.