La estructura británica MADMAX, con sede en la Isla de Guernesey, está especializada en motos, quads y coches de aceleración impulsados por turbinas de avión. Montar una unidad Rolls Royce C20B de un helicóptero Agusta Westland AW109 (sí, fabricado por la legendaria marca italiana que ostenta el mejor palmarés deportivo de una marca europea) para impulsar una moto es sinónimo de dragsters y velocidad, aunque no es la primera moto de estas características que conocemos. La MTT Y2K sorprendió a todos allá por el año 2000, un pepino plateado que anunciaba 320 CV, 576 Nm, 390 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 1,5 segundos. Por supuesto, los integrantes de MADMAX también tienen una.
Donald Campbell, Richard Noble, Mike Grainger, Richard Brown, Colin Fallows, Jack Frost son nombres históricos ligados a los récords de velocidad sobre 2 y 4 ruedas. Zef Eisenberg (cabeza visible de la empresa Maxicorp Autosports) ha sido el “valiente” piloto encargado de romper la barrera de los 350 km/h en los mundiales de velocidad celebrados el pasado agosto sobre una pista de 3.2 km de longitud del aeródromo inglés de Elvington (Yorkshire) con la nueva criatura naked… de 450 CV. O lo que es lo mismo, recorrer unos 100 m por segundo…
Ante semejantes prestaciones, solventar imprevistos por sobrecalentamiento en neumáticos o determinadas piezas del motor exige un trabajo ingente previo para no tener “sorpresas de última hora”. Sólo con fijarte en la carrocería de carbono, las tijas cuádruples, las pinzas de freno de seis pistones, el manillar de motocross, el basculante o la doble salida de escape te haces una idea de hasta dónde se puede llegar con este aparato…
