Todavía no habíamos hecho era repasar qué impuestos pagas al comprar una moto de segunda mano. Hemos visto en otras ocasiones todo lo que hay que tener en cuenta al comprar una moto de segunda mano y, también, te hemos contado lo que de verdad cuesta comprar una moto nueva más allá del PVP que encontramos. Así que vamos a darle un vistazo para que cuando vayas a hacerlo tengas todo controlado y no te lleves una sorpresa. Y es que al igual que pasa con las leyes, el desconocimiento no te exime del pago y, además, luego puede venir con multas y recargos.
Hechas las presentaciones vamos a comenzar a hacer el repaso de lo que hay que tener en cuenta antes incluso de qué impuestos pagas al comprar una moto de segunda mano, es decir, antes de firmar los papeles de compra venta.
Tal como recogen los amigos de Cüimo, lo habitual es que nos pongamos en manos de una gestoría que nos facilita el proceso y, en cierto modo, va a ser un seguro de que no se nos pase nada por alto. Obviamente, los gestores no trabajan gratis y a los impuestos que vamos a repasar, ahora habrá que sumar sus honorarios.
¿Qué impuestos pagas al comprar una moto de segunda mano?
La primera cantidad que debemos abonar es fija y se paga a la DGT, que son sus tasas, y que actualmente ascienden a los 55,77 euros. A eso hay que sumarle el ITP, que es un porcentaje sobre el valor de la moto que varía entre el 4% y el 8%.
En este caso, hablando del valor de la moto la banca siempre gana, y es que se elige el más alto entre el precio de mercado o el valor venal. Que pagas por debajo del precio de valor venal, pagarás el impuesto en función a este. Que el valor venal de la moto es inferior al importe de la venta, pagarás el impuesto en función al importe de la venta.
¿Qué otros impuestos pagas al comprar una moto de segunda mano?
Seguramente sabes que no acaba aquí y, te preguntarás qué otros impuestos pagas al comprar una moto de segunda mano. Pues bien, hay que añadir que este ITP, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, solamente se hace efectivo en el caso de que la transacción se lleve a cabo entre particulares. En caso de que la moto se compre a un profesional no tendremos ITP, pero entrará en juego el IVA que está establecido en el 21%.
Para hacerse una idea, desde Cüimo calculan que al comprar una moto de 8.500 euros (ellos hablan de un Yamaha TMAX), se pagarían un total de 480,57 euros en concepto de las tasas y el ITP, que siempre debe pagarlo el comprador. En caso de que comprásemos una moto a un profesional y el precio final fuera de 8.500 euros, 1.785 de los mismos irían destinados a pagar el IVA.
