Aunque el concepto de «redes sociales» como tal sea algo relativamente moderno lo cierto es que prácticamente desde el propio inicio de internet existen. Los chats, foros… eran una primigenia red social. Luego llegaron otros formatos que fueron evolucionando hasta lo que tenemos hoy en día y que, si lo examinamos a fondo, no tienen mucho que ver con aquello. Ahora las redes sociales se han vuelto un escaparate donde cada uno enseña lo que puede y lo que quiere, tú ya me entiendes… Los likes son una nueva droga y todos quieren mostrarse como lo que se espera de ellos.
Pero las redes sociales tienen mucho de positivo, nos han permitido recuperar contactos perdidos, conocer otra gente, otros lugares y, en esta ocasión, han ayudado a recuperar una moto robada. Nos trasladamos virtualmente a Cognac, donde un concesionario Honda hace ya unas cuantas semanas dejó probar su moto a un tipo de 50 años.

La moto era una Honda CBR1000RR Fireblade de segunda mano, y el «señor» era un posible comprador. Como es habitual, le dejaron probar la moto unos minutos y esos minutos se convirtieron en un tiempo indefinido cuando el tipo no regresó. La situación era clara, la moto había sido robada y el concesionario encendió todas las alarmas. Una de las medidas que tomó fue publicar en sus redes sociales el suceso junto a una foto de la moto, además de un llamamiento al caco para que la devolviera.
La comunidad motera volvió a dar muestras de su solidaridad y poco tiempo después ya eran 1.800 las veces que se había compartido la publicación, básicamente habían conseguido viralizarlo. Fue entonces cuando una persona a 100 kilómetros de la tienda dijo haber visto la moto. Por desgracia la policía no pudo actuar de inmediato y la moto volvió a desaparecer. Pero mientras, los cuerpos de seguridad estuvieron trabajando en ello y finalmente, un mes después, la moto vuelve a estar donde siempre debió estar, en la tienda.
Ahora está de nuevo a la venta, con algún kilómetro más y con una historia con final feliz, algo que normalmente no sucede cuando una moto desaparece. Así que ya sabes, si vas a vender tu moto y quieren probarla toma todas las precauciones posibles, que a veces la gente se disfraza de lo que no es. No hay más que echar un vistazo a las redes sociales…