El Campeonato Italiano de Velocidad ha servido de conejillo de indias para el reglamento del futuro campeonato de Supersport 300 creando una categoría llamada CIV Sport 4T y del que hablamos ayer en profundidad. Y aunque conseguimos llegar a unas conclusiones muy interesantes sobre la igualdad y posibilidades reales de cada modelo, hemos contactado con el piloto que este pasado fin de semana se llevaba precisamente el título de Sport 4T y que no ha sido otro que el murciano Pedro Javier Castaño Illán que, amablemente, nos ha dedicado unos minutos para hablar tanto de su experiencia en el Campeonato Italiano de Velocidad como en la categoría de Sport 4T, antesala de Supersport 300.
Un murciano transalpino
Para los que no conozcan a Pedro Javier ‘Furia Murciana’ Castaño Illán, sólo comentarles que lo hemos podido ver compitiendo en 2014 en la Copa Honda CBR250R o, el año pasado en el PreMoto3 del CEV. ¿Y cómo ha acabado corriendo el CIV y, además ganando? Pues él mismo nos lo cuenta.
“En 2014 recibí una invitación para correr como wild card en Italia, dentro de la Yamaha R125 Cup, que se disputa con motos YZF-R125. Gané ambas mangas y Yamaha me incluyó en el Proyecto Giovani, que promueven la búsqueda de jóvenes pilotos para llevarlos desde 125 hasta SBK. AG Motorsport Italia son los encargados de llevar toda la infraestructura como equipo Junior Team de Yamaha así como organizar el trofeo, por lo que arranqué con ellos en el nuevo campeonato de Sport 4T sobre una Yamaha YZF-R3.”
En este campeonato, Pedro ha estado delante desde el principio. Ganó la primera carrera en Vallelunga y repitió triunfo también en Mugello. Además se subió al podio en Misano así como dos veces en Imola. A pesar de no puntuar en la primera carrera de Misano, siembre ha estado primero o segundo en el campeonato y finalmente se llevaba este fin de semana el título en Mugello con 155 puntos, ocho más que Lorenzo Segoni que fue segundo.
Tras preguntarle sus planes para el año que viene, nos comentaba que “seguirá con el equipo AG Motorsport Italia aunque todavía no sabemos en qué campeonato correremos, no descartando hacerlo incluso en el nuevo de Supersport 300.”
Supersport 300, igualdad máxima
Llegados a este punto, lógicamente le preguntamos a Pedro que nos contase más en profundidad cómo es el campeonato y también, cómo son las características de las cuatro motos homologadas para participar: Yamaha YZF-R3, Kawasaki Ninja 300R, KTM RC390 Cup y Honda CBR500R.
Para él, el campeonato es ideal para pilotos de entre 15 y 19 años. Hay que tener en cuenta que Supersport como lo conocemos no desaparece, y esta categoría lo que viene es a llenar el hueco dejado por Superstock 600 desde esta temporada cuando desapareció como categoría individual para estar englobada con Supersport. Con unos costes muy reducidos y un reglamento en el que la preparación es mínima, el piloto prima por encima de la montura que se lleve.
Sobre el reglamento del CIV Sport 4T, base del futuro Supersport 300, Pedro Javier nos contaba que “ha conseguido que motos muy dispares tengan en el circuito un comportamiento muy similar y que además, en todas las carreras haya grupos de ocho pilotos luchando por la victoria.” No hay nada más que echar un vistazo a la clasificación final del campeonato y ver que entre los cinco primeros hay tres marcas diferentes.
Pasando a analizar cada una de las motocicletas, Pedro también nos contaba cuáles son los puntos fuertes y débiles de cada marca según había podido él ver en las carreras.
Por ejemplo sobre la Honda destaca que “es una moto que acelera mucho a bajas vueltas. Contar con mayor cilindrada le da una ventaja en los primeros metros de aceleración, sobre todo en las curvas lentas. Penaliza en un peso superior y que el motor no puede estirar tanto como los otros (Nota: 10.500 rpm para Honda y KTM frente a las 13.000 rpm de Yamaha y Kawasaki).”
En el caso de la Kawasaki “tiene mucha aceleración y es capaz de estirar más la marchas o, al menos, seguir dando potencia cerca de la línea roja. Es una moto equilibrada.” KTM quizás fuese la mayor sorpresa porque además de correr con la versión RC390 CUP, es decir, la orientada ya a competición, no consiguió grandes resultados. Para Pedro “el problema es quizás que no tenían ningún piloto que fuese capaz de ir verdaderamente rápida con ella. Es la moto de todas más cercana a competición tanto por chasis como por parte de ciclo, y además destaca por una velocidad punta superior al resto (toda sobrepasan los 200 km/h).”
Por último y hablando de la Yamaha con la que él corre “es una moto que no se puede decir que tenga puntos fuertes o débiles. Tanto el chasis como la parte de ciclo funcionan muy bien y te permiten tener un paso por curva muy rápido.”
Por último destacar la fiabilidad durante toda la temporada de las monturas, al menos en el caso de la Yamaha de Pedro pues no tuvieron el más mínimo problema con el motor en ningún momento y tampoco era necesario estar encima de él porque a pesar de las carreras, no sufrieron ningún bajón de rendimiento.
Ahora ya sabemos más de cómo será el nuevo campeonato de Supersport 300 gracias a Pedro Javier Castaño Illán, al que agradecemos enormemente el habernos concedido esta entrevista y felicitamos de nuevo por su título. Podéis saber más de él en su página de Facebook.
