Algunos equipos del Mundial SBK se quedaron en el circuito de Jerez para iniciar los Test invernales de cara a 2014*. El trabajo en la pista se veía condicionado por la climatología cambiante que obligó a los pilotos a entrar en boxes en varias ocasiones, todo ello antes de que la intensidad de los chaparrones obligase a dar por terminado el entrenamiento de forma prematura.
Todas las miradas estaban centradas en la esperada toma de contacto de Marco Melandri sobre la Aprilia RSV4 de fábrica. El italiano, que terminaba la temporada en la cuarta posición general como piloto oficial de BMW, conseguía subir al podio en la primera manga del día anterior y no salía a pista en la segunda por los fuertes dolores que sufría en el tobillo derecho. Melandri se subía finalmente a una RSV4 sin decoración externa, aunque sí con el dorsal 33.
Mientras el campeón del mundo Tom Sykes volvía a su casa en Inglaterra, su compañero de equipo Loris Baz protagonizaba su vuelta a la acción sobre la ZX-10R tras perderse las cuatro últimas citas de la temporada. El francés completaba 40 vueltas empleando únicamente neumáticos de carrera, demostrando un gran ritmo y confianza a pesar de su falta de actividad en las últimas semanas. El piloto del Ulster Jonathan Rea (Honda) también volvía a la pista tras su fractura de fémur.
Los pilotos locales Toni Elías y Xavi Forés también rodaron junto a Leon Camier, que llegaba a probar hasta tres unidades de la GSX-R con distintas configuraciones, además de otras combinaciones electrónicas y modificaciones motrices.
En Jerez no sólo rodaban monturas con preparación WSBK, sino también una de las nuevas Superbike EVO (la ZX-10R del equipo Kawasaki Pedercini) en manos del piloto Leandro Mercado.
