Una de las marcas punteras en lo que a motos eléctricas se refiere es Zero Motorcycles. Pues bien, ahora tienen marcado un nuevo reto que pasa por demostrar que una moto eléctrica puede ser eficaz. Para ello lo que van a hacer es competir en el prestigioso Trofeo Maudes, una “competición de resistencia” en ruta que lleva al límite a motos y pilotos.
Por lo que estamos acostumbrados a ver, para afrontar una ruta de casi 2.100 kilómetros, lo último que haríamos sería optar por vehículos de corta autonomía o que requieren un largo periodo para repostar. Es por ese motivo que el desafío es mayor, más si se tiene en cuenta que hasta que Zero ha irrumpido en la competición ningún otro fabricante de vehículos eléctricos se ha atrevido.
La historia del Trofeo Maudes
Hablábamos antes de competición entre comillas porque el Trofeo Maudes no es una competición al uso. Es más bien un desafío que busca poner a prueba a una máquina o grupo de máquinas en concreto. Es decir, no se lucha contra otros rivales sino que los participantes luchan para lograr el objetivo y no todo el mundo puede participar.
De hecho, aunque George Pettyt creó el desafío en 1923, justo ahora hace un siglo, no todos los años se han llevado a cabo los desafíos. De hecho, el Trofeo Maudes, que coge el nombre del concesionario que tenía Pettut, Maudes Motor Mart, no se celebra anualmente sino que lo hace solamente cuando hay quien se preste a tamaño desafío y siempre y cuando la ACU lo apruebe.
En esta ocasión Zero contará con dos motos y seis pilotos que serán los encargados de partir el próximo 29 de noviembre desde Lands. Entonces tendrán por delante las 1.300 millas (2.092 kilómetros) para mostrar las capacidades de las motos eléctricas.