Ni es la primera ni va a ser la última vez que veamos a Zayn Sofuoglu haciendo de las suyas con el beneplácito de su padre. A sus cinco años recién cumplidos no para de mostrar sus habilidades en las redes sociales, donde por cierto tiene la friolera de 3 millones de seguidores. Y él no sigue ni a su propio padre, un crack donde los haya.
Aun así el pequeño Zayn va creciendo, y gracias a las horas que ya ha invertido, y a la capacidad para aprender que tiene cualquier niño, vemos como sus desafíos no paran de crecer. Si que condujera un Porsche o una Honda Gold Wing ya era una locura, la cosa se va complicando con el paso del tiempo.
Las habilidades de Zayn Sofuoglu van más allá de las motos
En este primer vídeo puedes ver como a pesar de tener todas las motos que quiera prefiere el quad. Pero claro un quad tiene cuatro ruedas, le sobran dos… Así que se pone en dos ruedas con una facilidad digna del mejor stuntman, para dar una vuelta completa al circuito de entrenamiento de su padre. Ni un solo titubeo, aprovechando la pista y ¡hasta soltando la mano! Eso sí, lo del casco de monopatín y encima sin ajustar no nos ha gustado nada.
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Y ya que estamos con cuatro ruedas, en el segundo vídeo Zayn sí que las aprovecha para marcarse una GYMKANA en homenaje a Ken Block. Con su kart eléctrico, aunque con un sonido artificial, derrapa por dentro y por fuera de la casa de sus padres. Una casa que, como puedes ver, es espectacular y donde están algunas de las motos que Kenan empleó en su época de piloto.
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Para rematar, tanta acción le habrá dejado cansado y como Zayn Sofuoglu parece que se vale por sí mismo, se prepara para manejar el coche con la caravana. Quizás parezca fácil, hasta que ves como empieza a maniobrar con la pickup y la caravana de dos ejes. Si has cogido alguna vez un remolque quizás sea lo que más te impresione en un “mico” de cinco años recién cumplidos.
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No cabe duda de que Zayn está desarrollando muchas habilidades, tampoco que en casa de los Sofuoglu existen los medios para que pueda hacerlo. Lo que sí parece claro es que Kenan está preparando a su hijo para que sea uno de los pilotos turcos del futuro, porque lo de ser estrella ya lo ha conseguido…
