Los negociadores del Parlamento Europeo y del Consejo han llegado a un acuerdo el lunes respecto a la nueva normativa conocida como ‘Euro 7’, que establece estándares para la reducción de emisiones contaminantes provenientes del transporte por carretera. Contrariamente a la propuesta inicial de Bruselas, esta normativa se aplicará a los coches y vehículos ligeros a partir de 2027 en lugar de 2025, como se deseaba.
Conforme a la posición negociadora de los Veintisiete, la reforma entrará en vigor 30 meses después para coches y camionetas, y 48 meses después para buses, camiones y remolques, posponiendo efectivamente su aplicación hasta 2027 y 2029, respectivamente.
Aunque el acuerdo político aún requiere la aprobación formal del pleno del Parlamento Europeo y del Consejo en los próximos meses para convertirse oficialmente en norma, se contempla una disposición que permite a los pequeños fabricantes posponer la conformidad con los nuevos estándares hasta el 1 de julio de 2030 para automóviles y camionetas, y hasta el 1 de julio de 2031 para buses y camiones.
Así quedan las emisiones de la Euro 7
La revisión acordada por la Unión Europea, en línea con la transición hacia vehículos ‘limpios’ en 2035, conserva los límites de emisiones y las condiciones de prueba establecidos en la normativa anterior (Euro 6). Asimismo, establece límites más bajos para los vehículos pesados en comparación con el reglamento anterior.
Este acuerdo impone límites de emisiones de partículas de frenos (PM10) para automóviles y furgonetas, introduciendo requisitos mínimos de rendimiento para la durabilidad de la batería en automóviles eléctricos e híbridos, así como furgonetas. También incluye la creación de un ‘pasaporte medioambiental’ para vehículos que proporcionará información detallada sobre la eficiencia del vehículo al momento de su matriculación, incluyendo emisiones de CO2, consumo de combustible y autonomía eléctrica.
Cabe destacar que esta normativa no afectará a las motocicletas.
