No cabe duda y se puede ver cada día en las grandes ciudades españolas, que la contaminación ambiental es uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la sociedad. Desgraciadamente, no se trata de un mal que únicamente afecte a España, ni tampoco a Europa, todo el planeta sufre problemas de contaminación que, según todos los indicios, están contribuyendo a una aceleración en el cambio climático.
Dicho esto, al estar en la Unión Europea, muchas de las leyes referentes a medio ambiente vienen impuestas desde Bruselas y el Parlamento Europeo, que ahora ha decidido da un paso adelante en una lucha que se antoja imprescindible. Después de una votación, se ha aprobado el informe vinculante que busca mejorar todo lo relativo a la contaminación que procede de vehículos. En la votación, un total de 585 diputados votaron a favor, mientras que únicamente 77 lo hicieron en contra. Además hubo un total de 19 abstenciones.
En el citado informe, que no es más que el preámbulo de lo que debería ser un proyecto serio en el que se haga frente a un problema que todos los años causa miles de muertes, se repasan los puntos más importantes de lo que debería ser la política a seguir en materia de contaminación por parte de los vehículos.
Para ello, se recomienda que haya una Dirección General y que sea un único comisario europeo el responsable del tema. Así se conseguiría que todas las iniciativas legislativas sobre calidad del aire y emisiones tuvieran un mismo enfoque.
Además, en el informe se insta a tomar medidas rápidas para comprobar las emisiones y consumos reales en los vehículos con el fin de evitar en la medida de lo posible un nuevo caso como el de Volkswagen.
Igualmente, para evitar ese tipo de situaciones, las multas serían realmente cuantiosas con sanciones a los fabricantes de hasta 30.000 euros por cada vehículo que no respete las normas. También se insta a que todas las medidas se agilicen y pongan en marcha lo antes posible.
Por el momento se trata únicamente de buenas intenciones, por lo que habrá que esperar para que estas medidas terminen llegando como propuesta legislativa y convirtiéndose en leyes que velen por la salud de los ciudadanos europeos y la conservación del medio ambiente.
