Según Bill Davidson, vicepresidente del Museo Harley-Davidson: «Las fotos de Josh encarnan la libertad y la independencia, que es la esencia de Harley-Davidson. Sus fotografías ofrecen a los visitantes un vistazo a un mundo de exploración y la camaradería que sólo la carretera puede proporcionar».
La exposición “Living Lost” está compuesta por 30 fotografías que el propio Kurpius tomó junto a sus colegas en varias rutas por carretera. Todos ellos conducen Harleys clásicas y la moto de Josh aparece muchas veces: una Sportster Ironhead de 1977 bautiza como The Locust (Langosta).
Las fotos de Josh Kurpius, natural de Genoa (Illinois), muestran la belleza de los paisajes de una manera natural, en momentos de relax o, simplemente, por el placer de conducir. Imágenes que transmiten al 100% ese “American Way of Life” del que siempre ha hecho gala la facción más purista de Harley. Una exposición que sólo puede entenderse sobre dos ruedas.
“Living Lost” estará abierta al público hasta el 18 de mayo de 2014.
