La polémica está servida al hilo de la entrevista a Pit Beirer que ha publicado Speedweek. Según denuncia el director deportivo de KTM, las Honda de Moto3 giraban sistemáticamente a 13.600 rpm, superando el límite de 13.500 rpm que marca la reglamentación. Al parecer, la irregularidad se producía en 5ª y 6ª velocidad, con lo que las Honda NSF250RW de Moto3 sacaban provecho en las rectas.
La denuncia no queda en una simple acusación de Beirer. Al parecer, KTM presentó las pruebas que respaldan su acusación al director de tecnología de Dorna, Corrado Cecchinelli. De momento nadie se ha manifestado al respecto: ni Dorna, ni Honda, ni tampoco Dell’Orto, responsable de la ECU de Moto3.
De hecho, Beirer lamenta que ninguna de las partes implicadas adopten una decisión. Asegura que primero habló con Carmelo Ezpeleta, y después puso los hechos en conocimiento de Cecchinelli. Beirer no entiende como no han actuado al respecto, dado que Dell’Orto hace revisiones periódicas y aleatorias de las centralitas, y que el resultado de estos controles son del conocimiento de Dorna, la Federación Internacional (FIM), y la Asociación de Equipos (IRTA). Beirer habla del “hedor amargo” de esta situación.
Esta irregularidad, elevar el régimen de giro 100 rpm, no es despreciable, asegura Beirer. “No se ganan 5 CV de potencia, naturamente, pero si uno considera que perdimos el título del constructor solamente por 254 a 260 puntos, después de eso las pequeñas diferencias pueden ser cruciales”, dice el alemán.
