El Dakar 2016 se plantea como una película en la que el líder ya no está y ha dejado abierto un hueco en la “galaxia” por el que todos van a luchar hasta el final. Son muchos los candidatos y sólo puede quedar uno, el que se subirá a lo más alto del podio. Entre todos ellos hay cinco pilotos españoles con opciones a retener el título en casa: Joan Barreda, Jordi Viladoms, Laia Sanz y Gerard Farrés acumulan experiencia como para estar en los puestos de cabeza.
Joan Pedrero puede entrar en el grupo de favoritos en su vuelta a Sherco, mientras que el “sexto guerrero” será Iván Cervantes, uno de los novatos que se estrenan este año pero que puede dar más de una sorpresa. En total serán 17 los españoles presentes en el podio de salida de Buenos Aires, todos ellos con la esperanza de estar en la meta dos semanas después en Rosario. Trece etapas (diez en Argentina y tres en Bolivia) con poco desierto y que se plantea como una de las más rápidas de la historia del Dakar.
Comenzando por el “eterno favorito”, a pesar de llevar tan sólo dos dakares como piloto oficial HRC-Honda, Joan Barreda tiene otra oportunidad de oro este año, en una carrera que va a ser muy rápida. Su velocidad es su punto fuerte, aunque a veces ese fuerte ritmo es el que le lleva a cometer errores. El año pasado tuvo mala suerte con las caídas y con la mecánica, así que 2016 es un buen momento para enmendar el pasado: «llegamos a la gran cita con muy pocos kilómetros realizados encima de la moto ya que, para nosotros, ha sido un año bastante complicado, sobretodo por la lesiones que hemos tenido. Ello nos ha impedido poder seguir el plan de entrenamientos que teníamos estipulado y es por eso que, ahora debemos recuperar sensaciones y así, poder estar al 100% lo antes posible. Será una edición complicada, y en general con un alto nivel competitivo, lo cual, exige mucha intensidad y capacidad de concentración. Saber gestionar cada situación adversa con las que, seguro que nos vamos a encontrar, será clave. Por mi parte, tengo muchas ganas de que todo esto empiece ya. Afronto esta edición con muchas ganas. Ahora debemos mirar hacia delante y dar el máximo cada día para poder llegar a Rosario con un buen sabor de boca».
Jordi Viladoms es el piloto más experimentado de todos los nuestros y el que mejor resultado ha conseguido en esta carrera, segundo en 2014 por detrás de Coma. Conoce bien el terreno, la moto, el equipo y la forma de trabajar en los momentos complicados, así que si la mecánica no le traiciona como en 2015 puede ser el nuevo líder. es su participación número 11, el mismo dorsal que llevará en esta edición: «me ha tocado vivir las dos caras de la moneda, cuando las cosas van bien y cuando se tuercen, tenemos que estar preparados para ambas, y la mejor manera de correr el Dakar es no pensar en el resultado y disputar cada etapa por separado. Sabemos que el resultado no sólo depende de que hagamos bien las cosas ya que son muchos los factores que acaban influyendo, pero como cada año mi compromiso es dar el máximo cada día y luchar para ganar el Dakar. Se han hecho muy pocos cambios en la moto, es una garantía para nosotros porque sabemos que funciona muy bien, su fiabilidad está demostrada y en una carrera como el Dakar es un factor muy importante, más aún teniendo en cuenta que habrá dos etapas maratón, una de ellas con parque cerrado».
Laia Sanz rompió todos los registros el año pasado y terminó entre los mejores, con algunas etapas en las que sorprendió a todos. Tiene ritmo y cabeza, dos conceptos que combinados pueden ser el secreto del éxito. El “lado oscuro” es que en 2016 se le va a pedir lo mismo o más que en 2015, lo que puede no ser bueno en una carrera con tantos días: «sé que soy mejor que el año pasado y tengo más experiencia, pero igual acabo cuatro puestos más atrás que en la última edición y en cambio me siento más satisfecha de la carrera que he hecho. En el Dakar todo es una incógnita hasta el final porque puede suceder cualquier cosa. Con tantos pilotos punteros, habrá mucha competencia y muchas ganas de coger el testigo de Marc Coma. Eso probablemente hará que pasen muchas cosas porque es difícil aguantar un ritmo muy alto durante quince días».
Para Gerard Farrés, la de 2016 será su novena participación en una edición del Dakar. Sin suerte los dos últimos años sobre la Gas Gas ya que tuvo que abandonar, en 2014 al ver arder su moto y en 2015 por culpa de una hipotermia, este año tiene moto y equipo para estar delante. Se sube a la KTM del Himoinsa Team con garantías de poder llegar al final: «después de los dos últimos años en los que no pude ni terminar, voy con ilusiones renovadas, con un nuevo equipo y con una moto que tiene todo lo que necesito para hacerlo bien. Espero competir al máximo nivel, luchar y que el resultado sea el mejor posible. Si llego entre los 5 primeros será un resultado muy bueno pero si se dan las condiciones lucharemos por estar en lo más alto. El Dakar es la carrera más dura del mundo, en la que sufrimos, en la que te pasa de todo, en la que vives sensaciones extremas, pasando de la alegría a la desolación en poco tiempo».
Junto a ellos, una “futura promesa” de los rallies, Iván Cervantes. El multi campeón del Mundo de Enduro será uno de los novatos, pero por técnica y velocidad puede dar alguna que otra alegría a su equipo, el Himoinsa Team: «como novato que soy no sé lo que me voy a encontrar. Mi objetivo es acabar, hacerlo bien sin mirar mucho el resultado. Quiero disfrutar de esta carrera e intentar aprender lo máximo que pueda de navegación. Si todo va bien, de cara al año que viene sabré en qué he fallado y tendré las cosas mucho más claras. Estoy súper nervioso porque para mí es una carrera muy importante. Llevo más de 10 años compitiendo a nivel profesional, siempre en el top 3, pero me falta esa motivación extra que te da el probar cosas nuevas, el sentir experiencias diferentes. Esto es un desafío, una nueva meta. Me gustaría, algún día, disfrutar de esta carrera pensando en luchar para ganar».
Joan Pedrero, por su parte, vuelve a la marca que le ayudó a estar delante en esta prueba, Sherco. Después de un año como piloto Yamaha, Pedrero regresa a la marca francesa y se sube a una moto que ha ganado en fiabilidad y velocidad, dos aspectos en los que no estaba muy desarrollada los años anteriores: «este año se presenta con muchos pilotos jóvenes con hambre y creo que va a ser una carrera por eliminación. Si podemos estar entre los cinco primeros lucharemos por ello. Mi primer sueño era llegar al Dakar y ahora que ya lo he conseguido y llevo siete ediciones lucho por algo más. La segunda semana va a ser vital para mí porque siempre me encuentro mejor físicamente. La experiencia es un grado. Tengo ganas de empezar, de ver lo que he entrenado y las sensaciones que tengo encima de la moto».
Objetivo: llegar
Para el resto de españoles presentes en el Dakar 2016 el objetivo es estar en la meta de Rosario. Antonio Gimeno (KTM-Himoinsa) y Txomin Arana (Husqvarna) pueden conseguir buenos resultados, ambos con experiencia. El madrileño llevará una KTM Rally y será apoyo de Farrés y Cervantes, mientras que el piloto vasco este año no lo tiene tan de cara como en 2015, cuando terminó 16º con una Yamaha. Ahora correrá con una Husqvarna privada y por los pelos no se ha quedado fuera de la carrera por temas de presupuesto.
Dani Oliveras y Rosa Romero completan el repóker de pilotos del Himoinsa Team con una KTM 450 y rodarán juntos para apoyarse mutuamente. Para Armand Monleón (KTM), éste será su primer Dakar. El campeón de España de Rally TT se ha preparado a fondo para esta carrera. Marc Solà también acude por primera vez y lo hará con una Yamaha. Domingo y Carlos Fernández (Husqvarna), padre e hijo, repiten tras la experiencia del año pasado. Ambos consiguieron terminar y este año no se conforman con menos. Para Enric Martí (KTM), la insolación que le llevó al abandono en 2014 ya es historia y tras un año de descanso vuelve al reto del Dakar. José Julián García (Yamaha) es bombero en Madrid y si no llega a meta ya sabe que sus compañeros no le van a dejar volver… Por último, el también madrileño José María García cumplirá su tercera participación y lo hará con la misma BMW GS450 que llevó en 2011, eso sí, algo actualizada.
