La Suzuki GSX-R 1000 (21.329 €) emplea un propulsor tetracilíndrico de 999.8 cc, 202 CV a 13.200 rpm y 117.6 Nm a 10.800 rpm con distribución variable (SR-VVT). Mediante este sistema se varía la distribución del motor con el fin de ganar potencia a alto régimen y reducir emisiones contaminantes. Por ahora, sólo hay cuatro marcas que apliquen esta tecnología en alguno de sus modelos de calle: Honda, Ducati, BMW, Yamaha y Suzuki.
Tampoco debemos olvidar otras insignes siglas como la admisión (SRAD), el doble inyector por cilindro (S-TFI), los conductos de admisión superpuestos (S-DSI), sistema de escape con doble compensador (SET-A, válvulas de mariposa en los colectores para maximizar el par), IMU (Unidad de Medición de Inercia), triple modo de conducción (S-DMS), control de tracción con 10 niveles de intervención (TCS), ABS en curva (Motion Track Brake System) y embrague antirrebote asistido (SCAS).
Otras tecnologías Suzuki
Esta versión RR incluye control de salida y cambio semiautomático y, por si todo lo anterior fuera poco, debemos añadir tecnologías propias de Suzuki ya vistas en otros modelos Suzuki GSX-S750 o GSX-S1000, como el SESS (Suzuki Easy Start System, facilita el arranque con una leve pulsación en el botón START), el LRA (Low RPM Assist, sube el ralentí en primera para facilitar la salida desde parado y no calarla), ISC (Idle Speed Control, para controlar el ralentí) o SDTV (Suzuki Dual Throttle Valve, para conseguir una combustión eficiente y una entrega de potencia lineal).
