La última preparación de Rough Crafts, la Royal Enfield Continental GT “Midas Royale”, tiene un nombre que le viene como anillo al dedo porque Winston Yeh convierte en oro todo aquello lo que toca. Oro negro, pues es su color preferido, pero claramente sus trabajos son auténticas joyas de orfebrería.
Partiendo de la base de una Continental GT, ha reconvertido el modelo desde una cafe racer a una moto clásica endurance, pero manteniendo los detalles que tanto caracterizan los trabajos de este preparador taiwanés.
Una de sus señas de identidad es el depósito aunque en este caso ha fusionado las líneas maestras de Royale Enfield con las suyas, caracterizadas por tener en muchas ocasiones paneles que se prolongan por los laterales. En este caso simulan el semicarenado de algunos modelos de resistencia de los años 90 pero sin estar unido, directamente, con la cúpula delantera.
Esta cuenta con un doble faro elipsoidal desplazado desde el eje vertical. Por su parte, el colín nace en un nuevo subchasis con líneas clásicas y rectas muy marcadas y en cuyo interior se ha guardado todo el sistema eléctrico de la Royal Enfield.
Pasando a la parte ciclo nos encontramos con llantas de carbono BST, horquilla Öhlins FGRT213 con tijas fabricadas en CNC, amortiguador Öhlins TTX GP TR469, basculante de HPM Racing y frenos Beringer junto a neumáticos slicks Pirelli Diablo Superbike. Todo el conjunto se complementa con unos puños Motogadget, manetas Beringer, estriberas HPM Racing.
El motor recibe pequeña mejoras como un filtro de aire Sprint Filter y un escape de SC Project con una estética muy al estilo de los años 70. Por supuesto, el trabajo de pintura es el clásico de Rough Crafts con paneles negros, en carbono y un perfilado dorado.
