Noticia actualizada a 24/10/2024: Los cuatro miembros han sido apartados del consejo de administración, pero no despedidos.
Hace unas semanas hablábamos de los ajustes que el grupo Pierer Mobilty estaba llevando a cabo en formas de cientos de despidos de su personal. La situación dentro del grupo no está ni mucho menos estabilizada, y a la cadena de despidos que llevamos viendo durante el último año llegan cuatro bajas más.
Hablar de cuatro bajas cuando han sido despedidos más de 300 trabajadores puede no parecer demasiado justo, pero es que estos cambios realizados son dentro de la cúpula directiva de la propia empresa.
En total cuatro de los seis directivos con los que contaba hasta el momento Pierer Mobility han perdido su puesto. Solamente el consejero delegado Stefan Pierer y el co-CEO Gottfried Neumeister conservarán su cargo. Pero es que, además, dentro de estas cuatro bajas hay un nombre ilustre que lleva en el apellido la T de KTM y es Huber Trunkenpolz, nieto del fundador Hans Trunkenpolz.
En septiembre de 2023 Pierer Mobility alcanzó cifras récord, pero desde entonces todo se ha complicado
La lucha por parte de Pierer Mobility por dar la vuelta a una situación que en septiembre de 2023 parecía imposible, cuando batieron sus récords de ventas, continúa y los cambios internos forman parte de ella a pesar de que parece que tienen localizados algunos de los motivos que les han llevado hasta este punto.
Uno de ellos es que el mercado de Estados Unidos no está funcionando como debiera, y lo achacan a que el poder adquisitivo en el país norteamericano ha bajado y eso arrastra a todo el consumo. Además, en Europa las cosas no son mucho mejores, y con la economía europea estancada y la de Alemania en recesión, es difícil que el mercado europeo sea capaz de “tirar del carro”.
A pesar de todos los cambios y teniendo en cuenta la situación actual, Pierer Mobility no espera que la recuperación sea rápida, algo que deja claro que las duras medidas adoptadas, especialmente en lo que respecta a los 300 trabajadores despedidos, no han sido un mero capricho.
