Hoy os queremos mostrar el video que ha publicado un matemático en sus redes sociales y donde, de una manera sencilla e instructiva, nos argumenta por qué no ganas nada circulando a 140 km/h. Y decimos 140 km/h, aunque esta teoría es aplicable a otras velocidades en diferentes vías y circunstancias.
El profesor José Ángel Murcia se centra en un principio muy básico para su explicación de por qué no ganas nada circulando a 140 km/h: la relación inversa entre velocidad y tiempo. Para aplicar este principio solo hay que realizar un simple cálculo matemático, que nos otorgará las cifras exactas de tiempo que ganamos conforme incrementamos nuestra velocidad.
Comparte si te ha sido de utilidad👀. pic.twitter.com/8uBWrsV0B6
— Smartickmetodo (@Smartickmetodo) May 20, 2024
Por qué no ganas nada circulando a 140 km/h: Explicación lógica del asunto
Si nosotros circulamos, por ejemplo, a 40 km/h tardaremos una hora en recorrer 40 kilómetros. Para poder reducir este tiempo a la mitad deberíamos incrementar esta velocidad en otros 40 km/h, es decir, el doble. Sin embargo, cuando circulamos a 120 km/h y decidimos ponernos a 140 km/h, la ganancia de tiempo con respecto a este incremento de la velocidad, se convertirá en anecdótica si la comparamos con el ejemplo inicial.
A 120 km/h recorremos dos km cada minuto, o lo que es lo mismo 2.000 metros cada 60 segundos. Si aplicamos los cálculos que ha deducido el profesor, el incremento de 20 km/h más a nuestro ritmo inicial tan solo nos hará ganar poco más de cuatro segundos por kilómetro recorrido, o lo que es lo mismo, unos 500 segundos, 8,5 minutos aproximadamente tras una hora de conducción.
Indudablemente, el riesgo de tener accidentes se incrementa en función de la velocidad a la que circulemos, pero también la posibilidad de que nos caiga una multa. El circular a 140 km/h en una zona de 120 está penado con una sanción de 100 euros. Así que llegados a este punto uno debe de preguntarse: “¿merece la pena llegar 8 minutos antes a nuestro destino teniendo en cuenta los riesgos que ello entraña?”
Conclusión: que no ganas nada circulando a 140 km/h, más allá de unos segundos, y eso teniendo en cuenta que las condiciones del tráfico fueran totalmente estables e invariables, permitiéndonos circular de manera continuada a esa velocidad. Así que imagínate cuál es la ganancia exacta una vez realizamos un trayecto en carretera, en condiciones reales, dejando atrás la teoría.