En 1989 Yamaha mostraba en el Salón de Tokyo un prototipo que respondía al nombre de Yamaha Morpho. Su atractivo es que era capaz de variar su geometría, pasando de ser un modelo deportivo a otro turístico en función de las necesidades. Para aquellos que no lo conozcan, os recomendamos ver el siguiente vídeo rodado durante su presentación.
En la línea de la Morpho, Kawasaki ha presentado recientemente una patente pensada para introducir previamente en su gama de motocicletas deportivas, con la H2 a la cabeza, y que permitiría adoptar una postura mucho más cómoda cuando el piloto se tumba sobre el depósito gracias a un colín móvil que aumenta o disminuye su distancia desde el depósito en función de la velocidad a la que circulamos.
Así y a velocidades normales, el colín estaría cerca de nosotros con el fin de que contemos por ejemplo con el máximo apoyo lumbar en aceleraciones. Pero a medida que aumentamos la velocidad y necesitamos escondernos tras la cúpula y, por lo tanto, retrasar nuestra postura sobre el asiento, el colín se atrasaría a la vez que también se colocaría levemente más alto.
Esto permitiría por un lado ganar unos centímetros extra para estar más cómodo y, por otro lado, optimizar la aerodinámica a alta velocidad disminuyendo las turbulencias tras la espalda del piloto.
Esta variación ergonómica se consigue gracias a un pequeño motor eléctrico ubicado en el interior del colín que haría que este se moviese sobre una guía la distancia necesaria, prefijada en función de la velocidad a la que circule la motocicleta.
Como decíamos, esta innovación se introduciría primero en los modelos más deportivos de la gama aunque también se podría exportar al resto de la futura gama. Quizás, por ejemplo, con un sistema manual en vez de eléctrico que permita regular la distancia del colín en función de la altura del piloto, buscando así una ergonomía más personalizada.
