Dos años después de la muerte de Marco Simoncelli durante el GP de Malasia en Sepang, la historia se vuelve a repetir. Parece que una maldición rodea todo lo que lleve el apellido del piloto sanmarinense.
Pocos minutos después del inicio de la segunda sesión de clasificación del evento en memoria de Simoncelli, Romboni perdió el control de su supermotard a la entrada de una curva, cruzando la pista al igual que ocurriera con el piloto del dorsal 58, siendo arrollado por Gianluca Vizziello. Romboni fue trasladado en helicóptero al hospital Santa María di Goretti pero no se pudo hacer nada por su vida. Inmediatamente, los actos de celebración quedaron suspendidos.
Romboni participó en el mundial de velocidad entre 1989 y 1998, compitiendo en las categorías de 125, 250 y 500 cc con Honda, Aprilia y MuZ. Su etapa con la NSR 250 patrocinada por la tabacalera HB fue la mejor de su carrera deportiva. Nacido en Lerici en 1968, fue uno de los pilotos italianos más activos de la década de los ’90 y ganó seis grandes premios (su mejor clasificación en el mundial fue el 4º de 125 en 1990 y también en el de 250 en 1994). La actuación más recordada en sus dos años en el equipo Aprilia de fábrica fue el excepcional tercer puesto en el GP de Holanda de 1997 con la RSW 460 ante las tetracilíndricas japonesas. En 1999 y 2000 compitió en el Mundial de SBK con una Ducati privada, finalizando 17º y 35º, con una última temporada 2004 en Yamaha (35º). Actualmente era asesor de la Federación Italiana de Motociclismo.
La primera edición del “SicDay” se celebró el año pasado y fue ganada por Andrea Dovizioso, mientras que la carrera que estaba prevista para este domingo fue cancelada y sustituida por un desfile de pilotos como homenaje.
El Presidente de la Federación Italiana de Motociclismo, Paolo Sesti ha expresado: “Tras el trágico accidente que ha costado la vida de Doriano Romboni, hemos cancelado el evento como señal de duelo y respeto por Doriano y su familia, a la que mostramos nuestro apoyo en este momento tan difícil. Con Doriano perdemos a un piloto generoso, una persona de gran valor y un gran técnico, amado y apreciado por todos los que participan en el motociclismo internacional”.
