Visitar las instalaciones de un equipo de Fórmula 1 es difícil y traspasar el “área restringida” del departamento de carreras de los tricampeones del mundo de Red Bull es prácticamente imposible, pero saltarte uno de sus coches con una Gas Gas TXT 280 Pro de trial ante la escrupulosa mirada de Chris Horner y Adrian Newey sólo está al alcance de Doug Lampkin. Seguro que a Sebastian Vettel no le hizo mucha gracia.
Si además tienes tiempo de tomarte un helado, incordiar a los trabajadores en su puesto de trabajo, comerte un pote de “judías a lo england” en el comedor de la empresa y marcharte de allí cubierto de aplausos y vítores del respetable, es que eres el amo del lugar. También se permitió el lujo de toquetear el túnel de viento, tirar una papelera y firmar en el libro de visitas; para él es fácil.
A sus 37 años y tras retirarse del mundial en 2011 Lampkin es, junto a Jordi Tarrés y Laia Sanz, el único piloto de trial que tiene siete títulos mundiales al aire libre y el único en la historia de la competición masculina que los ha conseguido de manera consecutiva. Tras toda una vida corriendo para la italiana Beta, el de Yorkshire fichó en 2010 por tres temporadas con la española Gas Gas.
No es la primera vez
La acción conjunta puesta en marcha por la multimillonaria bebida energética austriaca y el astro inglés este año no es una idea nueva. Hace tres años, Repsol España hizo lo mismo con su piloto Toni Bou, un hombre llamado a superar todos los récords de trial establecidos, invitándole a “conocer” sus oficinas de Madrid con motivo de la conquista de su cuarto mundial de trial outdoor. El patrocinador del equipo Montesa-Honda manda, claro.
Pero si tenemos que hablar de pioneros en eso de “meterse hasta la cocina”, el protagonista fue el alemán Chris Pfeiffer. Gracias, cómo no, a Red Bull, el tetracampeón del mundo de stunt pudo acceder a los cuarteles generales de BMW en Múnich con su F800R en 2009 para alucinar a los presentes y terminar haciendo unas espectaculares acrobacias en la azotea del característico edifico de los “cuatro cilindros”.
