La temperatura extrema no solo hace mella en los conductores, que necesitan usar ropa ventilada que permita un buen intercambio térmico. También hay que tener especial cuidado con la mecánica, especialmente en el circuito de refrigeración (nivel, electroventilador, conductos, etc). Pero nadie dice nada del aceite del motor, que estará sometido a unas exigencias mucho mayores debido a la temperatura de trabajo más elevada. ¿Necesitamos cambiarlo entonces?
La respuesta es que no, no necesitamos hacerlo. Y la respuesta es sencilla, y se explica de dos motivos. El primero es que si nuestra moto tiene en plena forma el sistema de refrigeración, el motor se mantendrá en unos niveles óptimos de funcionamiento (vigilar siempre la aguja de la temperatura). Por otro lado, los aceites que se utilizan ahora son multigrado y, por lo tanto, cumplen las necesidades del motor tanto en invierno como en verano.
- Para saber más: Probamos los aditivos Liqui Moly para la gasolina

El fabricante de productos para moto Liqui Moly, de la mano de Bihr, nos recuerda que en todas las motos actuales (e incluso las clásicas que no tengan muchas décadas encima), se usan aceites multigrado, cuya viscosidad se adapta dependiendo de la temperatura a la que se encuentre. Por ejemplo, un aceite 10W-40 tiene un índice de viscosidad de 10 en temperaturas bajas y 40 en temperaturas más altas, adaptándose a la climatología.
Para saber cuál necesitamos, solo tenemos que consultar el manual de tu moto, para ver qué grado de viscosidad requiere el motor y utilizar el buscador de la página web de Bihr, distribuidor oficial de Liqui Moly en España, para hallar el producto que mejor se adapta a tu máquina. Entre la amplia gama que ofrece el fabricante alemán, podrás encontrar productos específicos para competición de velocidad, para carretera, para scooter e incluso para tu moto off-road, en formato bidón o bote.

También hay que tener algún que otro factor en consideración, como son as normas y especificaciones internacionales que cumplen. Entre ellas, encontramos la API (de la mano de los fabricantes de productos de petróleo estadounidenses), la JASO (impulsada por la Asociación de Ingenieros de Automoción Japonesa) y la ACEA (de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles).
Liqui Moly también ofrece otro tipo de productos, como aceite para la horquilla. Debemos recordar que el aceite hay que cambiarlo cada cuatro años, respetando también la viscosidad que nos indica el fabricante, y mantener así las propiedades de la suspensión que tan importante es a la hora de disfrutar de nuestra carretera favorita.
Para más información, podéis consultar la web de Bihr.