Cuando se anunció que en la temporada 2019 habría una nueva categoría en el Mundial de MotoGP se comenzó a especular sobre quién podría subirse a la nueva MotoE. Uno de los que estaban en casi todas las quinielas era Troy Corser. Pero, poco a poco, las plazas se fueron ocupando y ningún equipo anunció a Corser como su piloto para MotoE, por lo que el australiano quedaba fuera de la categoría de las motos eléctricas. Ahora Corser ha concedido una entrevista a un medio alemán en el que explica cuáles fueron los motivos por los que finalmente no formará parte de la parrilla de MotoE.
Con 47 años y dos títulos mundiales de Superbikes a sus espaldas, Troy Corser quería volver a la competición. Tras comenzara a hablar con varios equipos, todos le pidieron lo mismo: dinero. Y pese a que Corser podría haber pagado por correr, se negó a ello. “Hablé con Ajo, Gresini y Pons, todos pedían dinero y se tomaron su tiempo hasta el final. Volví a hablar con ellos en el Gran Premio de Philip Island y las plazas ya estaban ocupadas”, ha explicado Corser, “desde el principio hablé con Mike Trimby (jefe de IRTA y director de MotoE) diciendo que no pagaba nada, que si corro quiero ganar dinero”.
“Niki Tuuli ha firmado un acuerdo con Ajo y estoy convencido de que llevará dinero. Pero esa no era una opción para mi”, ha dicho Corser que, además, se ha mostrado decepcionado con toda esta situación. Sobre si el motivo puede haber sido la edad, el australiano lo tiene claro: “¿Soy demasiado viejo? En realidad no, estoy en mejor forma que cuando tenía 30 años. Sete Gibernau firmó con Pons y es solo un año más joven que yo”.
