La presencia de KTM en el mundial ya viene de lejos. No estuvo presente en las tres categorías al mismo tiempo, pero casi pues en 2005 contaba con la KTM GP 125 y al mismo tiempo, suministraba motores para el equipo de Kenny Roberts y sus Proton KR. Al año siguiente, desembarcaba en la categorías intermedia con la KTM GP 250.
A pesar de cosechar notables éxitos en 125cc y 250cc, la fábrica no pasaba por la mejor situación financiera por lo que tuvieron que dar carpetazo al mundial de velocidad y poder seguir así centrados en offroad, donde era clara dominadora en todas las disciplinas.
En la historia reciente y tras llegar a Moto3, los austriacos han cerrado el círculo esta temporada poniendo en pista su KTM de Moto2 además de la KTM GP16 de MotoGP. Como decíamos, es la única fábrica que cuenta con motos en las tres categorías pues aunque Honda suministra los motores de Moto2, ningún equipo corre con chasis desarrollados por ellos.
Y sólo dos carreras después de llegar a MotoGP y Moto2, ya han conseguido varios hitos como una pole y un podio en la categoría intermedia así como que tanto Pol Espargaró como Bradley Smith entrasen en los puntos. Puede no parecer demasiado, pero no es fácil meterse entre los 15 primeros en una parrilla de 23 motos en total.
Con posibilidades reales de llevarse el Mundial de Moto3 año tras año, en MotoGP es cuestión de tiempo que den o no con la tecla. Difícil pero no imposible. Pero donde ha empezado a hacer que se cambie el status quo es en Moto2.
Tras acumular experiencia y recabar datos gracias a su filial de suspensiones, WP, KTM fabricó un chasis tubular para el motor de la Honda CBR600RR. Con su experiencia en este tipo de construcción, ha dado con la clave a pesar de que es su primer año y Miguel Oliveira ha estado delante en las tres carreras disputadas.
Esto ha puesto contra las cuerdas al resto de fabricantes como Suter, Kalex o Speed Up. No por sus resultados sino porque los austriacos pueden ofrecer sus chasis a un precio mucho más bajo que el resto. La fabricación de un chasis tubular es menos costoso, más para una fábrica que trabaja siempre con este tipo de parte ciclo. El resto, desarrolla doble viga de aluminio, mucho más caro tanto de construir como de modificar posteriormente.
KTM pugna además por la liberalización del motor en Moto2, como en Moto3. Con un coste fijo, en caso de que Dorna tomase la decisión de eliminar el suministrador único de motores podría hacer que esta categorías se convirtiese en una copa casi monomarca, y acabase con los pequeños fabricantes de chasis que sobreviven hoy en día en el mundial.
Dicen que los dedos de Honda en el Campeonato del Mundo de MotoGP son largos, pero el paso de KTM es firme.
