Bosch ha anunciado su presencia en EICMA 2023, concretamente en el stand B54, pabellón 18. Allí nos dará a conocer todas las novedades con las que el próximo año ampliara su oferta tecnológica dentro del sector de las dos ruedas. Entre ellas mostrará diferentes soluciones de seguridad, visualización y conectividad.
Una de estas novedades será el Cluster TFT de 5″ que permite a los motociclistas ver toda la información necesaria de un vistazo. La pantalla, compacta e instalable incluso en espacios reducidos, estará disponible para distintas categorías de motocicletas.
Bosch presentará diferentes soluciones técnicas relacionadas con la seguridad
La Conectividad Integrada Bosch Cluster (ICC), disponible en varios tamaños, añade funciones de conectividad al panel TFT. Ahora conectando nuestro teléfono al ICC, los motociclistas pueden acceder a la navegación, escuchar música y hacer llamadas telefónicas. La versión de aproximadamente diez pulgadas permite dividir la pantalla para mostrar simultáneamente, por ejemplo, datos e indicaciones de navegación.
La marca también dará a conocer su nueva versión del MSC (Motorcycle Stability Control). Según un estudio interno, Bosch expone que si todas las motocicletas estuvieran equipadas con este sistema, solo en Alemania se podrían evitar o mitigar el 5% de todos los accidentes con lesiones personales.
Hasta ahora, el MSC se utilizaba en motocicletas medianas y grandes, en combinación con una unidad de medición inercial (IMU) 6D, que determina variables como el ángulo de inclinación. En el futuro, el MSC para motocicletas más pequeñas se basará en una variante ABS más compacta, combinada con la unidad 6D y un sensor 3D, para ofrecer un sistema rentable para el segmento básico.
Con el MSC, ABS e IMU integrados, se pueden agregar funciones y aplicaciones adicionales sin tener que instalar programas adicionales. Por ejemplo, la función Hill Hold Control para motos de turismo grandes, el ABS para conducción Offroad y el ABS en curva para conducción en carretera y en circuito.
Sin duda una de las novedades principales con las que contara la marca será los sensores de radar de Bosch de nueva generación para motocicletas. El radar de nueva generación ofrece un rendimiento mejorado gracias a un alcance de 210 metros, hasta 50 metros más que la generación anterior.
Además, el ángulo de apertura horizontal, 15 grados más amplia, mejora la precisión de la detección de objetos. El sensor es la base para futuras mejoras en los sistemas de asistencia a la conducción de vehículos de dos ruedas.
Por otro lado Bosch presentará un motor eléctrico de buje de última generación. En él se han optimizado el diseño interno reduciendo el peso total en 2 kg y manteniendo intactas las prestaciones. Además, trabaja de manera coordinada con el Drive Control Unit de Bosch que permite implementar funciones varias de utilización.
Por ejemplo el modo de arranque suave (Smooth Riding) o el control de crucero para mantener una velocidad constante. Controlado por el motor eléctrico, el control de tracción eléctrico evita que la rueda trasera patine al arrancar y aumenta la seguridad en la conducción.
La función One-Throttle Ride, por su parte, aumenta la eficiencia del sistema de propulsión, recuperando la energía de frenado cuando el motociclista suelta el acelerador. Esto ayuda a prolongar la vida útil de la batería hasta en un 8%.
Además de la Drive Control Unit para motores eléctricos, Bosch presentará en EICMA el Vehicle Controller que ofrece la posibilidad de implementar funciones adicionales a las básicas para la propulsión eléctrica.
Por último Bosch también está trabajando para optimizar los sistemas de combustión actuales para hacerlos más sostenibles. En este espacio la marca alemana suministra sistemas de gestión de motores y componentes para el sector de las dos ruedas.
Estos permiten a los fabricantes cumplir con las futuras normativas sobre emisiones, como la actual Euro 5 y BS 6 (Bharat Stage 6), en India, incluido el On-Board Diagnostics II (OBD).
Junto con la última tecnología de sensores, los sistemas de gestión del motor pueden mejorar significativamente la eficiencia en comparación con sistemas arcaicos de alimentación que se usan en los mercados emergentes.
Los componentes del motor Bosch, como inyectores, sensores y unidades de control, ya son capaces de manejar mezclas de combustible hasta E100, incluso en el sector de los vehículos de dos ruedas.
Funciones adicionales, como varios modos de conducción o soluciones de transmisión electrónica Quickshift, se pueden implementar rápida y fácilmente a través de la ECU del motor, incluso en categorías de modelos de pequeña cilindrada.
