La esperada presentación de la Honda RC213V-S ha tenido lugar por fin. Después de mucha espera los responsables de la marca japonesa han dado a conocer una moto que marca una nueva etapa dentro de Honda, el inicio del desarrollo de nuevos modelos. Honda ha aprovechado la experiencia adquirida por muchos de los técnicos que han trabajado en los diferentes modelos de MotoGP desarrollados desde 2002. Fruto de ese “know-how” nace la Honda RC213V-S, que es una verdadera MotoGP lista para rodar por la calle.
La RC213V-S va a ser producida de una en una, siguiendo la misma rutina que se emplea en la construcción de una MotoGP. Se producirán en la planta de Kunamoto, donde se ha organizado un departamento específico para esta labor.
Honda hace especial énfasis en la manejabilidad como una de sus mayores virtudes. Es una réplica completa de la moto de carreras, con los mismos materiales. En esencia, la RC213V-S está basada en la RCV1000R del año pasado: no tiene válvulas neumáticas, ni tampoco cambio “seamless” porque, según los responsables de Honda por una cuestión de costes. Sí dispone de un “shifter”. Tampoco tiene ABS. El motor será el mismo V-4 de 1.000 cc de a MotoGP.
El modelo base tendrá una potencia de 159 CV a 11.000 rpm, para un peso de 170 kgs. Con el “kit” de potenciación eleva su caballaje a los 215 CV a 13.000 rpm, y un peso de solo 160 kgs. El “kit” está compuesto de escapes, RAM-air, CPU, “shifter” de carreras, juego de desarrollos y caballetes.
Va a ser una moto muy exclusiva y limitada, de la que se van a fabricar poco más de 200 unidades (el objetivo sería fabricar 213), y el inicio de la producción será a finales de septiembre, para comenzar a entregar las primeras motos en octubre. Y esta exclusividad tiene un precio: 191.000 euros. El “kit” especial tendá un coste de unos 12.000 euros.
Según Hasegawa-san, uno de los responsables de desarrollo de la moto, al que han contribuido pilotos míticos como Shinichi Itoh y Tohru Ukawa, “el objetivo que hemos buscado es dar a nuestros clientes la oportunidad de tener las sensaciones de una MotoGP, con la misma precisión y manejabilidad que ofrece una MotoGP”.
La producción de la RC213V-S se desarrollará por un periodo de tiempo limitado, y tiene que estar concluida en 2016. Es por una cuestión de homologaciones: el 1 de enero de 2017 entra en vigor la normativa Euro 5 que obliga a utilizar sistemas ABS para motos de más 125 y cilindradas superiores, y la RC213V-S no tiene este sistema.
Otra cuestión más es el mantenimiento. Las revisiones se tendrán que realizar en unos centros específicos designados por Honda. Solo habrá tres puntos en Europa dode llevarlo a cabo, y uno de ellos será en la sede de Honda España, en Santa Perpetua de Mogoda (Barcelona). El mantemiento es muy especializado, porque se tiene que realizar con herramientas específicas y por personal debidamente preparado. Aunque no han ddo detalles de las tarifas, los costes de mantenimiento serán elevados, aunque Honda se hará cargo de su envío al centro de mantenimiento que corresponda. En la versión estándar las revisiones se realizarán cada 12.000 km, pero al instalar el “kit” será necesario pasar revisión cada 3.000 km.
¿Cuántas motos podrán llegar a venderse en nuestro país? En Honda España no han hecho previsiones porque es muy complicado saberlo, pero nos recordaron que cuando se puso a la venta la NR750 se vendieron siete unidades en nuestro país.
Marc Márquez y Dani Pedrosa estuvieron presentes en el evento inaugural. Márquez tuvo la oportunidad de rodar con la moto en el circuito de Alcarrás: “Es una moto muy divertida. Tiene la misma posición de conducción que la MotoGP. Da mucha confianza al tumbar, e incluso he llegado a rozar con el codo. Es muy similar a nuestra moto. Nunca ha visto una moto así por la calle”, dijo Márquez. Por su parte, Pedrosa añadio: “Es una réplica completa. Es como si pusieran un F-1 en la calle”.
