Morbidelli arrancaba mejor que el poleman Pasini, al que se le levantaba la moto, colocándose primero e intentando abrir un hueco tal y como hiciera Fenati media hora antes. Las condiciones seguían siendo de auténtica “pista de patinaje”, con mucha agua, poca visibilidad, lluvia constante y caídas desde la primera vuelta. Aegerter se mantenía segundo seguido por un sexteto compuesto por Pasini, Oliveira, Nakagami, Luthi, Baldassarri y Syahrin que luchaba por el tercer puesto. En la curva cuatro, Pasini y Baldasarri se irían al suelo poco después y Oliveira subía al tercer puesto.
A falta de 23 vueltas, Morbidelli se caía en la frenada previa a la curva 8 cuando rodaba en solitario más rápido que nadie. Los suizos Aegerter y Luthi lideraban marcando vueltas rápidas, con el portugués Oliveira en tercera posición algo más distanciado. Por su parte, el malayo Syahrin, que salía 14º, demostraba su excelente técnica de pilotaje en agua remontando a pasos agigantados y colocándose tercero tras la caída de Oliveira.
A falta de 10 vueltas para la conclusión, el top 10 se establecía con Aegerter, Luthi, Syahrin, Nakagami, Bagnaia, Corsi, Binder, Quartararo, Cortese y Manzi. Un susto de Aegerter que se colaba hacía que su compatriota liderara la carrera momentáneamente, pero rápidamente volvía a recuperar la cabeza. La pelea por el cuarto puesto entre el trío Nakagami, Bagnaia y Corsi era otro de los puntos interesantes en esta fase de la carrera.
Las últimas 5 vueltas de carrera fueron muy intensas, con Aegerter y Luthi pegados y Syahrin (que marcaba un 1.57.8) cerca de ellos: todo podía pasar. Finalmente, Luthi tiró la toalla ante un Aegerter que no cometió errores, pero contento tras recortar la distancia con Morbidelli en la general del campeonato a sólo 9 puntos. Sólo 16 pilotos terminaron esta carrera, en la que hubo 21 caídas. El único piloto español que cruzó la meta fue Xavi Vierge (15º).
