Mediaset va a hacer un despliegue especial en Italia en torno al regreso de Max Biaggi. Contará con un equipo de 30 personas en Misano que va a seguir minuto a minuto al piloto romano. Habrá casi 40 cámaras pendientes de él: en su moto, en el “box”, en el “breifing” técnico, con sus ingenieros, e incluso hasta en el “motorhome”.
Incluso el ingeniero de pista de Biaggi tendrá permanentemente un micrófono para escuchar sus conversaciones, y Max llevará un pulsímetro que transmitirá la frecuencia cardiaca de Biaggi, y se mostrará en una pantalla. El momento cumbre de este seguimiento será la segunda carrera, en la que Biaggi saldrá con un micrófono y se podrán escuchar todos sus comentarios.
Independientemente del montaje de Mediaset, que no cabe duda que resulta espectacular, Biaggi se muestra entusiasmado por su regreso, aunque insiste que no se marca objetivos y que solo desea divertirse: “Nunca he perdido de vista las motos, siempre las he seguido y de alguna manera me siento al día, aunque por supuesto no como piloto. Ahora que he tomado esta decisión de correr, aunque solo sea para divertirme, por el placer de hacerlo, me estoy preparando para todo lo que venga durante el fin de semana y voy a intentar encontrarme lo mejor posible”, dijo el romano a WorldSBK.
Biaggi tiene una clara perspectiva de la situación: “*Me guiaré por el instinto*, me basaré en mis recuerdos y sensaciones del pasado, ya que hace bastante tiempo que no disputo una carrera. Después, seguramente habrá un choque con la realidad, los segundos que se escapan rápidamente y los rivales, que corriendo cada dos semanas, siempre están buscando el límite. Es una perspectiva que no veo desde hace varios años, pero no estoy asustado. Sé perfectamente que irán rapidísimo y por eso no me pongo expectativas antes de empezar”.
