No ha empezado el Mundial de MotoGP y ya somos muchos los que estamos deseando que pasen los primeros tres Grandes Premios de la temporada para volver a ver a Dani Pedrosa compitiendo en MotoGP. El tres veces campeón del Mundo regresará de nuevo a la máxima categoría como piloto invitado y lo hará en una de sus pitas talismán, el Circuito de Jerez – Ángel Nieto.
Hay que recordar que en el trazado jerezano sorprendió a propios y extraños luchando de tú a tú con Loris Capirossi por la victoria en su carrera de debut para luego conseguir tres victorias a lo largo de su trayectoria deportiva. Además, en Jerez Dani Pedrosa logró multitud de podios y atesora una curva con su nombre, la anteriormente denominada como Dry Sack.
Ya en los últimos meses del año pasado, cuestionado sobre su papel de cara a 2023 y a la posibilidad de disputar algún Gran Premio, Pedrosa dejó entrever que esas posibilidades existían al haber cambiado el formato de competición para poder evaluar el funcionamiento en carrera de la KTM.
No hay que olvidar que desde que dejó de competir en MotoGP al acabar la temporada 2018 ha desempeñado un papel fundamental dentro del departamento de desarrollo de KTM. Aunque en principio no se mostró interesado en competir, en 2021 dio el paso para participar en el GP de Styria donde acabó en una meritoria décima posición. Todo ello tras sufrir una caída que obligó a mostrar bandera roja en la primera vuelta, ir al box, coger la segunda moto y completar las 27 vueltas tras remontar desde la décimo quinta plaza.
Todos esperamos con ganas ver qué papel puede desempeñar Pedrosa en Jerez, aunque antes de ello podremos verlo en los test IRTA de pretemporada. Soñar con luchar por un podio sería dejarse llevar por la emoción del momento, pero Pit Beirer, el máximo responsable de KTM Motorsport ha dicho literalmente: “Leyendo entre líneas, él no haría un wilcard si pensara que la moto no es competitiva”. Estaremos más atentos que nunca a los test de Sepang.