La historia de España está aparejada indisolublemente al mundo de las dos ruedas. Probablemente, ningún país del mundo tiene una relación tan intensa con el motociclismo, en términos generales, como el nuestro. A lo largo de las últimas décadas hemos demostrado, por activa y por pasiva, como esta pasión corre por nuestras venas a una velocidad endiablada convirtiéndonos en seres realmente afortunados. No solamente por el simple hecho de poder disfrutar de la moto de la forma que lo hacemos, sino también por esa fuerza casi sobre natural que siempre nos ha empujado a defender este práctica hasta las últimas consecuencias, ya sea desde el lado del aficionado o en lo deportivo.
Por eso hoy queremos hacer un repaso a la historia de uno de los eventos deportivos de las dos rudas más importantes en nuestro país, el conocido como GP de Jerez e incluso nombrado en la temporada de 1988 como Gran Premio Expo 92, en referencia al gran evento sevillano que ya se estaba preparando para cuatro años después. Ese año Eddie Lawson con el Marlboro Yamaha Team Agostini se haría con la victoria en la categoría reina. Joan Garriga y Jorge Martínez Aspar harían lo propio en 250 y 125 cc respectivamente.
Pero para analizar la historia del trazado andaluz hay que remontarse a la década de los sesenta donde la ciudad de Jerez atesoraba una gran tradición en cuanto a pruebas deportivas relacionadas con el motociclismo. La mayor parte de ellas disputadas en los típicos circuitos urbanos improvisados, contando con trofeos tan importantes como el de la Merced donde pilotos nacionales de la talla de Ángel Nieto, Sito Pons o Benjamín Grau se disputaban la victoria rodando al límite entre las balizas de paja.
También otros de renombre internacional como Marco Lucchinelli o el mismísimo Barry Sheene. De aquellas carreras, a medio camino entre lo profesional y lo amateur, donde cada uno corría con lo que podía, pero por encima de cualquier cosa estaba esa pasión única de la que antes hablábamos, empieza a nacer la necesidad de crear un circuito permanente. Este debía, además, cumplir con las normativas de homologación del momento para poder acoger pruebas del motor a todos los niveles.
Asi que para comienzos de la década de los ochenta el proyecto empieza a gestarse por iniciativa del por aquel entonces alcalde de la ciudad Pedro Pacheco Herrera, el cual recurre al ingeniero de caminos italiano Sandro Rocci, que ya había encargado del diseño del antiguo Jarama. Según cuentan, el diseño final que tendría la mítica pista andaluza se esbozó con una cadena tirada en el suelo. En diciembre de 1985 es inaugurado finalmente el Circuito de Jerez, por el que pasarían no solamente campeonatos de motociclismo, sino también pruebas de F1 y Sport-prototipos, con diferentes categorías en todos y cada uno de ellos.
Es en 1987 el año inaugural del primer GP de jerez y hasta allí llegaban las estrellas del motociclismo mundial que por aquel entonces hacían las delicias de los aficionados. Con cuatro categorías a disputar 80, 125, 250 y 500 cc pudimos ser testigos de cómo dos emblemas nacionales del momentos, Derbi y Jorge Martínez Aspar lograban imponerse en la cilindrada de los 80 cc ese fin de semana. Otros nombres memorables de aquel GP fueron los del australiano Wayne Gardner, que se alzaría al final de aquella temporada 87 con el campeonato del mundo de 500 cc, Fausto Gresini que se impondría en la categoría de 125 cc y el alemán Martin Wimmer que haría lo propio en 250 cc.
A partir de aquella temporada, y de manera ininterrumpida, el mítico circuito jerezano ha sido testigo de batallas épicas dentro del Mundial de MotoGP. Sobre él se han vivido momentos irrepetibles que han quedado en la retina del aficionado para siempre, siendo considerado por muchos, a lo largo de todo este tiempo, como una de las catedrales del motociclismo a nivel internacional. También ha sido objeto de reformas y mejoras para poder ser adaptado a los nuevos tiempos. Cambios que han garantizado su continuidad dentro del Mundial hasta la fecha.
Es precisamente cinco años después de su inauguración cuando se acometen las primeras obras de mejora, coincidiendo además ese mismo año con dos eventos multitudinarios en nuestro país: La EXPO 92 y los Juegos Olímpicos del mismo año. Para entonces se decide suprimir la primera chicane, sustituyéndola por una curva parabólica, todo ello en aras de lograr una mejor seguridad. Desde entonces el trazado jerezano contaría con una distancia final de 4.423 m y además dispondría de un total de 700 metros de protecciones hinchables, conocidas como Air France y que eliminarían de manera definitiva el uso de balizas de paja como había sido tradición hasta el momento.
A lo largo de la siguiente década viviríamos momentos de infarto con la ya conocida rivalidad entre Alex Crivillé y Mick Doohan o veríamos nacer a estrellas de la talla de Dani Pedrosa o Valentino Rossi. Ya metidos en el nuevo milenio, año 2002, el mítico circuito andaluz vuelve a ser objeto de una profunda revisión, donde ahora se contaría con boxes y pit-lane de nueva factura. También es la temporada en la que se construye la plataforma mirador, conocida coloquialmente como ovni y una sala de prensa con capacidad para más de 300 periodistas.
Seis años después se vuelve a poner en valor la idea de seguir mejorando las instalaciones y se decide ampliar algunas de las escapatorias en un intento de velar, con el mayor grado posible, por la seguridad de los pilotos. También se asfaltan algunas de estas zonas y se sigue dando prioridad a trabajos como el mantenimiento de la pista o la adaptación de los pianos, algo que se ha repetido de manera constaten cada temporada, siendo considerado por muchos como uno de los mejores circuitos del planeta en este aspecto.
Indudablemente, estas 36 temporadas han dado para mucho y es por ello que no queríamos dejar en el tintero algunos de los números y estadísticas que en definitiva le han otorgado ese estatus de catedral del motociclismo a la mítica pista española. Por ejemplo que a lo largo del año disfruta de más de 3.200 horas de sol. También que cuenta con más de 40.500 m² de instalaciones interiores y que en estas disponemos de un total de 43 boxes. De igual forma resaltar la sala de prensa con 714 metros cuadros de superficie o la de conferencias, un espacio dotado de 298 m² a disposición de los equipos.
¿Y en lo deportivo?
Aquí podríamos estar días hablando, no solamente de los números globales que conforman estás más de tres décadas de Mundial. También en las anécdotas, vivencias y momentos inolvidables que allí se han dado. Eventos tan transcendentales como el cambio de nombre que se llevó a cabo en 2017 tras el fallecimiento del mítico Angel Nieto, pasándose a llamar desde entonces Circuito de Jerez-Ángel Nieto. También como algunos de nuestros pilotos han logrado dejar su impronta en forma de curva, como Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa o Alex Crivillé, entre otros.
A nivel deportivo los nuestros han logrado imponerse en 38 ocasiones a lo largo de estos 36 años y lo han hecho en todas y cada una de las categorías que se han disputado desde entonces. En lo individual Valentino Rossi es el rey indiscutible de este GP con 9 victorias, dentro de su bagaje personal, a lo largo de sus 26 años de carrera. Le siguen Jorge Lorenzo con hasta 5 laureadas repartidas entre las categorías de 250 cc y MotoGP y Alex Crivillé y Dani Pedrosa con 4 victorias respectivamente. De igual forma nuestra mayor sequía a lo largo de todo este tiempo sin lograr un triunfo en el GP de Jerez se daba entre la temporada de 1990, cuando Jorge Martínez Aspar lograba la victoria en 125 cc y la de 1995 momento en el que Alberto Puig en 500 cc volvía a reencontrarnos con el triunfo en el circuito andaluz.
Por marcas Honda es la firma que más rédito ha logrado en esta pista con un total de 39 victorias repartidas en las categorías de 50, 125, 250, 500, Moto3 y MotoGP. Por detrás una mítica de los años noventa, Aprilia que logra imponerse hasta en 23 ocasiones en las cilindradas de 125 y 250 cc con pilotos de la talla de Valentino Rossi, Marco Simoncelli o Lucio Cecchinello, entre otros. El tercer puesto del cajón lo ocupa Yamaha con 14 victorias, repartidas entre las categorías de 250 cc, 500 cc y MotoGP. Por último, otras como KTM o Ducati, también han logrado su cupo de victorias a lo largo de estos años, aunque estas últimas en menor medida.
Una historia digna de contar y que esperamos que en lo sucesivo siga acrecentando esa aura tan especial que emana nuestro GP de Jerez, donde aficionados, pilotos y máquinas de competición, se hacen uno año tras año. Dar las gracias a la atención prestada por parte de la organización del circuito que nos han facilitado algunas de las imágenes que hoy os podemos mostrar en este artículo.