Hace unos días contábamos la situación en la que se encontraba el Go Eleven. El equipo no había conseguido que Aprilia accediera a dejarles su RSV4 para la temporada 2019, y se encontraba en plenas negociaciones con Ducati para intentar conseguir una Panigale V4 R. Todo parecía indicar que el único “pero” que la fábrica de Borgo Panigale ponía a Go Eleven era el piloto. Román Ramos tenía un acuerdo firmado con Go Eleven, con el que el español se aseguraba una plaza en WSBK para 2019. Pero, al parecer, Ducati prefería que fuera otro piloto el que llevara su Panigale V4R. El primero que se encontraba en la lista de Ducati era Xavi Forés.
A su vez, después de haber perdido la plaza en el Barni Racing, Forés había empezado a hablar con varios equipos del Brithish Superbikes para conseguir una plaza en el campeonato inglés. Pero viendo el interés que Ducati tenía en que fuera Xavi quien llevara su moto en el Go Eleven, parecía que el futuro de Forés estaba más cerca del WSBK que del BSB. Además, con la posible continuidad de Forés en WSBK, parecía quedar una opción en el British Superbikes para Jordi Torres. Pero no ha sido así.