En los Ćŗltimos tiempos asistimos a la proliferaciĆ³n de grandes maxitrail en el mercado. Muchas de ellas no pisarĆ”n jamĆ”s el campo, pero tambiĆ©n contemplamos el retorno al concepto primigenio de las trail, es decir, motos capaces de transitar por todo tipo de terreno sin descuidar sus capacidades ruteras en asfalto. En definitiva, un vehĆculo capaz de todo: desde ir a por el pan hasta dar la vuelta al mundo. Con un planteamiento tan flexible, tambiĆ©n tiene que haber una oferta muy variada en el mercado de accesorios.Ā
De una parte a aquĆ es muy comĆŗn ver motos trail de gran cilindrada, aderezadas con el correspondiente pack de maletas de aluminio. Son muy Ćŗtiles y resistentes, pero al mismo tiempo presentan limitaciones respecto a las formas interiores y son susceptibles de abollarse en las caĆdas en parado o en el campo. Esos son los dos aspectos en los que unas alforjas de calidad se imponen por goleada. SHAD presenta sus nuevas alforjas Terra TR40 para suplir o complementar, segĆŗn sean tus necesidades, a unas maletas rĆgidas.
SHAD es una empresa nacional que desde 1992 diseƱa y fabrica asientos y maletas, tanto para equiparlas en motos de serie (BMW, Yamaha, Polaris, Indian, KTM, Triumph, Honda y Piaggio son sus clientes), como para el mercado de accesorios. No son nuevos en esto, como comprobaremos en el montaje de las alforjas TR40, en el que se hace patente que la marca estĆ” presente en todo el proceso de producciĆ³n (diseƱo, ingenierĆa y producciĆ³n): todo encaja, es tal y como indican las instrucciones.
Por eso quisimos ir un poco mĆ”s allĆ” e instalar las alforjas TR40 en una Honda Ćfrica Twin a estrenar, pero con una variaciĆ³n muy comĆŗn: una lĆnea de escape completa, en este caso Akrapovic, para saber si un cambio de ese calado pudiera afectar a la instalaciĆ³n de los soportes de las alforjas, que dicho sea de paso, son los mismos soportes que para unas maletas rĆgidas. AsĆ, cambiar de maletas a alforjas y viceversa (siempre que sean SHAD) se convierte en un trĆ”miteĀ
SHAD Terra TR40
La propia marca las define como āunas saddlebags de aventuraā. Una declaraciĆ³n de intenciones respaldada por un material ultra resistente a la abrasiĆ³n que cumple con las normativas medioambientales REACH y OEKO-TEX Standard 100, con una resistencia de 1.500 horas a la exposiciĆ³n a los rayos UV. Tanto las costuras como la base de las alforjas estĆ”n reforzadas, mientras que el plegado enrollable de las alforjas garantiza la impermeabilidad. Si no quieres que se moje ni siquiera el exterior, tambiĆ©n viene una funda impermeable para cada una de ellas. Un detalle de practicidad es el orificio de drenaje que hay en su interior. Si has viajado en moto con equipaje, habrĆ”s pasado por un sinfĆn de calamidades, como que se vierta un lĆquido en el interior de tu equipaje o simplemente tener que abrir tus alforjas/maletas durante un aguacero. El agujero de drenaje facilita tambiĆ©n el lavarlas y secarlas.
La capacidad de las TR40 es de 32 litros, lo que puede dar lugar a confusiĆ³n dada su denominaciĆ³n; mientras, admiten hasta 10 kilos de peso cada una de ellas. El contenido estarĆ” siempre a buen recaudo, pues la llave y el bombĆn son de Ćŗltima generaciĆ³n, desarrolladas por SHAD. El sistema de cierre āDouble Locking Systemā reduce la posibilidad de robo al fijar la alforja al soporte, impidiendo tambiĆ©n su apertura si no es con la llave (ver vĆdeo). La cerradura dispone de una tapa para evitar que el polvo y la suciedad se introduzcan en el bombĆn. Ā
Si la propia naturaleza de unas alforjas ofrece flexibilidad en sus formas, las Terra TR40 permiten ampliar la capacidad de carga a travĆ©s de 8 puntos de agarre reforzados en cada una de ellas, pudiendo colocar varios accesorios extra. A modo de ejemplo, viene incluido un porta botellas con sistema MOLLE, pudiendo configurar multitud de posibilidades de carga. AdemĆ”s y para rizar el rizo, las correas de ajuste cuentan con 6 hebillas Duraflex, que ajustan las formas a la carga y en cuyos extremos disponen de cierres de velcro para evitar que los sobrantes vayan ondeando descontrolados, pudiendo afectar a la estabilidad y comodidad de conducciĆ³n. Ambas alforjas pueden transportarse en mano fĆ”cilmente gracias a sus asas de transporte acolchadas y van jalonadas con elementos reflectantes para ser vistos en la moto o con las alforjas en mano. Las alforjas se enganchan a la moto a travĆ©s de las fijaciones 4P System, exclusivas de SHAD y que permiten el enganche o desenganche con un sencillo gesto, aparte de ser compatibles con otras maletas
InstalaciĆ³n
En el vĆdeo que acompaƱa a esta prueba te explicamos paso a paso cĆ³mo se montan los soportes de las alforjas, pero te aseguro que no confiere ninguna dificultad. SĆ³lo necesitarĆ”s dos llaves allen (de 4 y 5 mm) y dos llaves fijas (de 10 y 13 mm), si bien te recomiendo que sean de carraca para agilizar el trĆ”mite y convertirlo en un juego de niƱos. Para que todo encaje a la primera, es importante no apretar del todo ningĆŗn elemento durante el montaje y esperar a que el kit estĆ© presentado al completo en la moto antes de apretar todo definitivamente.Ā
Los soportes derecho e izquierdo apenas presentan diferencias, salvo que el soporte derecho se ancla en uno de sus vĆ©rtices a la pletina que sujeta el escape, mientras que el soporte izquierdo lo hace en la estribera del pasajero. En el caso de la Ćfrica Twin en la que instalamos las maletas, puedes ver en el vĆdeo que solo tuvimos que aƱadir un casquillo de separaciĆ³n de 5 mm (menos de 1ā¬ en cualquier ferreterĆa) en la pletina que soporta el escape para que el resultado fuera impecable.
EN MARCHA
Lo primero que llama la atenciĆ³n, nada mĆ”s instalar las alforjas Terra TR40, es la estampa que dibujan en la moto. Casi apetece lanzarse inmediatamente por caminos y carreteras para que adquieran la pĆ”tina de la aventura. En ciudad y respecto a unas maletas rĆgidas de la misma capacidad, cuentan con la ventaja de poder ajustar el tamaƱo de la alforja a su contenido, en lugar de ocupar siempre la anchura mĆ”xima de sus posibilidades. De este modo, cualquier āerror de cĆ”lculoā en cuanto a nuestra anchura entre coches es menos probable y en caso de que suceda, probablemente serĆ” menos oneroso en cualquier sentido.
Fuera del asfalto y en terrenos rizados y/o abruptos, se muestran mĆ”s eficaces que unas maletas; pesan menos y por ello soportan mejor la vibraciĆ³n. Al igual que en ciudad, cualquier caĆda en lo marrĆ³n absorberĆ” el impacto mejor que cualquier maleta rĆgida. El mayor damnificado serĆ” el contenido de la alforja (no creo que lleves lĆ”mparas de cristal de Venecia); pero seguro que en medio del campo no quieres que se doblen las pletinas del escape/estribera de tu moto, por no hablar del subchasisā¦