Hoy os traemos una preparacion de Yamaha V-Max que a buen seguro no dejara indiferente a nadie. Obra de Euan Ryan, un escocés creador de Shoogly Shed Motors, lleva a sus espaldas cinco preparaciones completas de este estilo en los últimos años. Lo que comenzó como un simple Hobby en Su garaje de 6 x 4 metros, lo ha llevado a desarrollar una labor más minuciosa en colaboración con otros especialistas de la zona.
Esta Yamaha V-Max “Musashi” es un proyecto en colaboración con Jon Beckett de 78 Outlaw Creations. Según hemos conocido por los amigos de Bike Bound, en ella querían incluir reminiscencias a la cultura samurái japonesa y el estilo Neo-Tokyo, visto en películas de anime del tipo Akira. Para ello emplearon como donante un ejemplar con documentación y especificaciones UK, lo que equivale a no disponer de una unidad Full-Power.
Según cuenta Euan, la Yamaha V-Max 1200 de 1985 fue importada de EE. UU y se encuentra en un estado fantástico. Llego al acuerdo con Jon Beckett de 78 Outlaw Creations de que él se encargaría de la preparacion para, posteriormente, Beckeett hiciera lo propio con algunos aspectos de la personalización.
En cualquier caso esta customización ha requerido de mucho tiempo de trabajo, ya que en ella se han mod¡ficado, mejorado o sustituido casi un 90% de los componentes que la conforman.
Yamaha V-Max “Musashi” en detalle
Entre las soluciones aplicadas más destacables en esta Yamaha V-Max “Musashi” destacaríamos:
- Chasis y basculante reforzado y modificado
- Llanta trasera de Taylor Made a medida con neumático de 200 mm
- Horquilla frontal procedente de una Yamaha R1 y componentes internos K-Tech
- Llanta delantera procedente de una Yamaha XJR1300
- Frenada completa Brembo
- Embrague Barnett
- Sistema de escape Black Widow
- Electrónica NWT X21 Plus
- Varias piezas fabricadas artesanalmente
Por otro lado, el trabajo de pintura fue llevado a cabo por Autotecnique, mientras que el tapizado exclusivo del asiento es obra de Tom Hurley. Para finalizar buscaron un apodo con el que bautizar esta exhaustiva preparación, y finalmente optaron por «Musashi», en honor al legendario guerrero samurái japonés.
Su esencia rebosa personalidad y carácter por los cuatro costados y en palabras de su creador: «Musashi es infinitamente divertida, ridículamente poderosa y más rápida que un samurái armado con una Katana. ¡Lo único que esta moto no puede pasar de largo es una gasolinera…!»