Raül Torras ha regresado este 2022 al famoso Circuito da Guia, donde se disputa la emblemática prueba del Macau GP. Lo hace tras salir de una lesión en dedo y de la que no estaba recuperado al 100%, por lo que su octava plaza a los mandos de su Honda CBR1000RR-R Fireblade SP se convierte en algo muy meritorio. Aún más teniendo en cuenta la exigencia de la prueba y el nivel de los pilotos que allí se dan cita desde hace más de 50 años.
Además, ha contado con la inestimable ayuda de NG Brakes como patrocinador oficial, que han aportado al piloto catalán todo lo necesario para poder ser competitivo en pista. Recordemos que el trazado asiático es de tipo urbano, cuenta con 6,2 kilómetros de longitud y una anchura que va de 7 metros en su punto más estrecho (en la horquilla Melco) hasta los 14 metros en la zona más ancha (justo en la recta de meta).
Destaca por la ausencia de escapatorias y la combinación de largas rectas con consecuciones de curvas muy cerradas, lo convierte en un trazado sumamente técnico, en el que los frenos prácticamente no tienen descanso. Y en el que no todos los motoristas se atreven a competir. En los cuatro días que dura la competición se dan cita hasta 7 categorías diferentes entre coches y motocicletas, aunque en todas y cada una de ellas el nivel de exigencia es máximo.
En esta 69ª edición solo Torras ha defendido los colores nacionales y lo ha hecho apoyado en la experiencia y dedicación de una firma de frenos tan importante como NG Brakes. Este comenta: “Es vital contar con partners de primer nivel y de garantía contrastada como NG Brakes, ponemos nuestras vidas en sus manos”, señalaba en referencia a la peligrosidad intrínseca de las Road Races y de pruebas en circuitos urbanos como este. Si te cuelas, te vas contra un muro.»
Sin duda la frenada es crucial en circuito de este tipo y es por ello que el lema de NG Brakes define a la perfección la esencia del Macau GP: «No Limits, Just Brake». Según comenta Torras: “A mi entender, Macau es muy crítico y exigente con los frenos. No solo por la frenada de Lisboa Corner, sino también porque en toda a zona de la “Montaña” (de Lisboa Corner hasta la horquilla Melco) se les exige muchísimo. La frenada de Lisboa es durísima, abres gas fuerte en la salida y vuelves a frenar fuerte, vuelves a abrir en la subida a la Maternidad y vuelves a frenar fuerte, inclinas, abres gas y otra vez frenas… Es mucho “stop & go” en marchas cortas. Los frenos no tienen tiempo a enfriarse, sufren mucho de “fading”, y si no tienes un buen equipo de frenos, te quedarás sin ellos. Y, aparte de perder la confianza, si te cuelas, te vas contra un muro… Es lo más crítico de la moto en este circuito”.
Y continúa en lo que se refiere a la frenada más complicada, la de Lisboa Corner: “es impresionante, de más de 300 km/h a menos de 60 km/h, en una frenada de más de 250 metros, entre muros de hierro ARMCO, con una grada a rebosar de gente y con un margen de error 0. Es una frenada espeluznante”. Con unas audiencias millonarias. Las tribunas (con precios de hasta 180 euros al día) se llenan hasta la bandera, el paddock está repleto de Vips, hay ambiente por todos lados, los casinos a tope. Hay que vivirlo in situ. Todos los que han estado allí están de acuerdo en decir que no hay evento de Motorsport más grande.
