2015 será recordado por muchas cosas, la mayoría de ellas todavía tienen que escribirse. En el caso del mundo de las dos ruedas ya conocemos uno de esos acontecimientos importantes del calendario, y es que una de las marcas con mayor recorrido e historia del sector, MV Agusta, cumple su 70 aniversario.
Como uno de los fabricantes de referencia no sólo en Italia, sino en el mundo entero, MV Agusta ha predicado con una forma propia de hacer las cosas, lo que le valido para ganarse el derecho a presumir de ser una de las firmas más elitistas que existen en el panorama del motociclismo. Todos sus modelos llevan un trozo de esa esencia, lo que convierte a MV en una marca con clase.
La marca de la familia Castiglioni se fundó el 13 de febrero de 1945. Los planes iniciales de la firma italiana fueron crear una moto que pudiese correr contra otras de su misma clase, y ese trabajo dio como resultado el nacimiento de la MV Agusta 98, que conquistaría su primera victoria el 6 de octubre de 1946 en La Spezia. Un primer éxito al que luego le han seguido 75 títulos mundiales y 270 victorias entre 1948 y 1976. La época más gloriosa se vivió con Ubbiali, Hailwood, Read y sobre todo Giacomo Agostini, que llevó a la MV a lo más alto del Olimpo del motociclismo.
En 1980 cerró el departamento de carreras y dejó la fabricación de motos hasta que en 1991 Cagiva la compró e inició una srgunda etapa en 1997 con la F4 750 que dura hasta la actualidad. El catálogo 2015 ya suma 19 modelos. Giovanni Castiglioni (hijo de Claudio), que dirige la empresa desde la muerte de su padre en 2011, no han sido ajeno a los nuevos tiempos, y fruto de ello ha sido su unión con el grupo Mercedes-AMG, una unión que busca abrir nuevos horizontes para la marca, pero sin perder sus señas de identidad.
Estas nuevas perspectivas tienen que ver inevitablemente con el mundo de la competición, especialmente en SBK y Supersport, donde regresó hace pocas temporadas, tratando de alcanzar las cotas más altas en este universo de la velocidad. Conocimientos que luego se transmiten a la calle y a sus clientes, fieles como pocos.
