Lo primero que nos ha llamado la atención de la eléctrica Menza Lucat es su aspecto de moto modificada en un taller. Sin embargo, su carrocería de fibra de carbono que incluye el conjunto depósito-asiento así como sendos paneles laterales forman parte del equipamiento de serie.
Cuenta con un chasis trellis de aluminio. El basculante también es tubular y la suspensión de tipo cantilever. Delante monta una horquilla invertida WP de generosas dimensiones así como frenos de disco de 300 mm y 230 mm, el delantero mordido por una pinza radial de cuatro pistones Monza. Las llantas, multiradiales (nunca mejor dicho) cuentan con nemáticos en medidas 110/70 R17 y 150/60 R17.
El motor, tipo brushless DC sin escobillas entrega una potencia de 18 kW y un par motor de 60 Nm. Cuenta con una batería de 72 V y 6kWh con la que se consigue una autonomía de entre 100 km y 150 km en función de su utilización. Dispone de frenada regenerativa y la batería se puede recargar en 90 minutos en una topa rápida o bien en aproximadamente 4 horas en un enchufe convencional.
No cuenta con caja de cambios por lo que la transmisión es directa. Su velocidad máxima es de aproximadamente 120 km/h, suficientes para una moto cuya principal orientación son los recorridos urbano o de circunvalación. El peso es de poco más de 150 kg.
