Ya han pasado tres años desde que Husqvarna lanzara al mercado su 701 Supermotard, una moto que evoluciona el monocilíndrico KTM LC4 de “toda la vida” hasta lograr los 74 CV, una cifra que la iguala a muchas bicilíndricas. Tomó el relevo de la antigua Husaberg FS 570 y, aunque la FS 450 estándar sigue existiendo, la marca de la H quiso dar el ‘Do de pecho’ al ofrecer una moto que fuese ágil entre el tráfico urbano y un arma en las escapadas cortas por carretera de montaña. La Husqvarna 701 Enduro aterrizó un año después, en 2016, como sustituta de la KTM 690 Enduro R, ideal para posicionarse entre las trail medias y las enduro de 450, una buena moto que con algunos retoques podría servir incluso como moto de raid y rutas endureras de largo recorrido. El año pasado ambas sufrieron su primer restyling, aumentando la potencia y retocando la suspensión, por lo que para el año que viene las cosas se mantienen como están.
Las principales características pasan por su buena relación peso potencia, con 145 kg en vacío para 74 CV a 8.000 rpm (692.7 cc), incorporando acelerador electrónico, inyección electrónica Keihin, suspensiones WP multirregulables (horquilla de 48 mm), tijas mecanizadas CNC, pinzas Brembo (delantera radial de 4 pistones en la SM y axial de dos en la E), discos lobulados (Galfer), ABS Bosch de última generación, chasis multitubular de acero al cromo-molibdeno, subchasis de poliamida (5.2 kg) con depósito de gasolina de 13 l. integrado, basculante de aluminio, embrague antirrebote APTC (Adler) de accionamiento hidráulico (Magura), carrocería ergonómica, asiento monoplaza con funda estriada para mejorar el agarre, intermitentes LED o aros de llantas de aluminio firmadas por Akront (DID en la Enduro) entre otras características. El cubrecárter o los cubremanetas abiertos son exclusivos de la versión Enduro.
Otros puntos a destacar pasan por los numerosos accesorios disponibles para mejorarla o la posibilidad de limitación para usuarios de carnet A2.
