Continuamente vemos en nuestras redes sociales fotografías de un antiguo almacén en mitad del campo o un granero con la techumbre en estado ruinoso que resulta estar lleno de vehículos clásicos. En ocasiones abandonados por sus antiguos propietarios, o eso cuentan. Otras por fallecimiento de estos y posterior herencia de hijos, sobrinos o quien toque. En cualquiera de los casos a la mayoría de todos nosotros los ojos nos suelen hacer «chiribitas» pensando en que haríamos de toparnos con un tesoro de esas magnitudes.
El último de estos casos que hemos conocido por medio de los compañeros de Ride Apart es la historia que nos ha mostrado el bloguero, Youtuber y amante de todo aquello que huela a gasolina Freddie Dobbs. Este inquieto británico, que actualmente viaja por Lituania, se topó hace unos días con un jardín que literalmente está sembrado de Jawas y Ladas, todos ellos pertenecientes a la época dorada de la antigua URSS.
En el video que colgó Dobbs en su canal de YouTube podemos recrearnos con la cantidad ingente de material que atesora allí el propietario de todas estas reliquias. En este caso el hallazgo sí que tiene dueño, no como los ya mencionados que a menudo se producen a modo de ficción en redes sociales. Hablamos de un señor de la zona que además de amante de este tipo de motocicletas y automóviles dedicó gran parte de su vida a trabajar como mecánico, por lo que la afición le viene prácticamente de cuna.
Más concretamente estuvo más de 40 años en ese sector en los cuales ha ido acumulando una cantidad realmente grande de motocicletas de la marca Jawa e incluso alguna unidad HHH, otra de las marcas que se fabricaban en la época en la antigua Checoslovaquia, dividida en dos nuevos estados en 1992: República Checa y Eslovaquia. También posee varias unidades de Lada, incluido un modelo sedán, que fue propiedad de su padre, y que al parecer únicamente se empleaba en el antiguo KGB ruso. Saquen sus cuentas. Según le cuenta a Dobbs le gustaría volver a ponerlo en funcionamiento, ya que para él tiene un valor sentimental muy importante.
La realidad es que a este hombre el trabajo se le acumula. El número de proyectos que según le cuenta a Dobbs le gustaría llevar a cabo son demasiados. Eso unido a la falta de tiempo y presupuesto ha empujado al propietario de todas estas reliquias a poner en venta a la mayoría de ellas. Así que si estáis interesados en haceros con alguna de ellas el propio Dobbs se ofrece voluntario para hacer de interlocutor con el dueño de estas antiguas glorias. Para más información podéis contactar directamente en la web oficial de Freddie Dobbs.