En los últimos tiempos hemos conocido algunas historias del típico granero abandonado donde se halla una interesante colección de motocicletas, generalmente del siglo pasado, pero que en definitiva apasiona a todo aquel que sea amante de las dos ruedas. Además, por lo general suelen ser lugares que han estado cerrados durante mucho tiempo, pero lo que se encuentra en su interior se suele mantener en buen estado. Por aquí os dejamos algunos de estos ejemplos:
Pero lo que hoy os mostramos se sale de todos los cánones conocidos hasta ahora. No solamente por la cantidad ingente de motocicletas que se hallan en este lugar, sino también por el estado deplorable de la mayoría de ellas. Os hablamos de la parte trasera de una propiedad en Tennessee donde su propietario, antiguo mecánico de Honda, ha estado décadas almacenando no solamente motocicletas, sino también miles de repuestos.
Se cuentan por miles las monturas que hay allí en estado de semiabandono. No sabemos muy bien si reír o llorar a lo largo de los más de seis minutos y medio que los chicos del canal de YouTube Auto Archaeology nos muestran, con una mezcla de tristeza y asombro, la ingente cantidad de motocicletas, de todos los tipos y estilos, que hay esparcidas y apiladas a lo largo y ancho de la propiedad.
Ahora su propietario ha pensado que quiere empezar a deshacerse de ellas, ya que como es evidente no sabe qué hacer con semejante cantidad de motos. Como podemos ver en el video las hay de todas las marcas, en especial de las cuatro grandes japonesas. La mayoría pertenecen a la época de la década de los 70 y 80, aunque también hay muchas unidades de años anteriores a este periodo. Todo ello mezclado con otro tipo de vehículos como automóviles e incluso algún camión.
Sin duda una historia realmente increíble y que pone de manifiesto que esto de las dos ruedas puede llegar a ser enfermizo, literal. Así que si queréis haceros con alguna de estas máquinas en la misma descripción del video podéis acceder al email del propietario. No estaría mal darle una segunda vida a algunos de los ejemplares que allí se encuentran.