De todas las cosas importantes que hay en una moto, podríamos decir que la más importante es el freno. No hay nada más peligroso que no poder detener la moto y, precisamente, en eso de detener la moto en Brembo tienen mucha experiencia. Tanto que son la firma más reconocida en el panorama actual en lo que a frenos de moto se refieren.
Mucha culpa de eso la tiene el hecho de que, en competición, la mayor parte de los equipos de élite eligen sus componentes. Y eso, a su vez, hace que el fabricante de origen italiano vaya desarrollando cada vez más sus productos aplicando el conocimiento que ha ido adquiriendo a lo largo de los años.
De hecho todo este transvase de conocimiento es el espíritu más íntegro de la competición, esa que se empleaba como escaparate de lo que eran capaces las primeras motos y que, a su vez, probaban cosas que terminaron siendo parte de nuestro día a día.
Brembo GP4-MotoGP
Es la gran novedad de Brembo de cara a 2024 y viene directamente derivado de MotoGP y WSBK. Ya a simple vista se aprecia que el trabajo realizado en ella va encaminado a lograr la mayor refrigeración posible. La pinza es mecanizada desde un bloque macizo de aluminio, lo que aumenta sus prestaciones porque es de una sola pieza. Esto evita que las juntas y elementos que encontramos en una pinza que no sea “monoblock” desaparezcan, y con ello se gana en sensación y estabilidad de rendimiento.
Pero el punto fuerte de la GP4-MotoGP es que ha sido diseñada pensando en conseguir el mayor intercambio térmico entre la pinza y el aire. El mayor desafío al que se enfrentan los frenos es al de conseguir una estabilidad de funcionamiento según van pasando las frenadas, y a eso contribuyen los aletines y también el tratamiento de níquel de los pistones que mejora el rendimiento a altas temperaturas.
Brembo Hypure
A diferencia de la GP4-MotoGP, el Brembo Hypure está pensado más en un uso en carretera ,donde las frenadas continuas no son tan extremas ni se lleva al máximo el sistema de frenado cada poco tiempo. Es, por tanto, otro tipo de pinza de freno que manteniendo la rigidez y la capacidad de frenado de su antecesora en la gama, ha logrado rebajar en un 10% su peso.
También hablamos de una pinza monoblock, aunque en este caso no es mecanizada sino que está hecha con aluminio fundido. Aun así la tecnología aplicada no es poca cosa y es que han desarrollado un sistema de resorte, almohadilla y pin que consigue minimizar el frenado residual (cuando no estamos frenando, pero las pastillas rozan involuntariamente), con lo que se alarga la vida útil de las pastillas y se consigue mejorar la respuesta de frenado.