Siempre implicada con proyectos solidarios, Alicia Sornosa es una de las “grandes mujeres viajeras” sobre moto. Después de dar la vuelta al mundo y completar otra serie de viajes de menor recorrido pero igual intensidad, Sornosa ha vuelto a subirse a su BMW F700GS para emprender camino, ni más ni menos que al desierto del Gobi, una basta región que ocupa el sur de Mongolia y el norte de China.
La intención del viaje no es establecer un nuevo hito o llegar donde otros no han llegado, si no recaudar fondos que sirvan para ayudar a los más desfavorecidos de la capital del desierto Ulán Bator y en concreto a los niños, a los que el proyecto busca poder escolarizar y dar soporte en su día a día si la recaudación lo permite.
Como suele suceder en los grandes viajes, las distancias son largas, con muchos kilómetros de carreteras, que en el mejor de los casos son asfaltadas, siendo habitual que aparezcan piedras, arena, barro…
Por delante aún queda la parte más dura del recorrido, atravesando arenales, ríos… en una de las regiones más recónditas del mundo y con un corte 100% off road y más de 900 kilómetros que le permitirán llegar hasta Ulán Bator, en pleno desierto del Gobi. Para más información sobre el proyecto y las donaciones para ayudar a los niños, Alicia Sornosa ha habilitado una zona en su web .