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5 errores en moto que debes evitar en carretera

Para evitar problemas circulando en moto por carretera, ten en cuenta estos cinco consejos
Fotos: SMN/Marcas
Disfrutar de la moto en carretera o usar la moto para desplazarnos por ellas es, para muchos, uno de los mejores momentos del día o de la semana. Sin embargo para evitar sustos y disgustos hay que evitar estos cinco errores.

Ahora que ya hemos visto qué 5 errores en moto debemos evitar en ciudad, toca el momento de coger carretera y manta (nunca mejor dicho) y disfrutar de nuestra moto en un entorno más abierto y, normalmente, más descongestionado: la carretera. Puede que la uses para ir al trabajo o puede que la uses para disfrutar de la moto, en cualquiera de los casos debes tener en cuenta los 5 errores que debes evitar cuando vayas en moto por la carretera.

No circules por el arcén

Si eres de los que usa la moto en el día a día habrás visto a cientos de motoristas usar el arcén. Pues bien, has de saber y tener meridianamente claro que está literalmente prohibido. Salvo excepciones en las que expresamente se permita, no puedes circular por el arcén sin arriesgarte a una multa. Que lo hayas visto o lo hayas hecho un montón de veces no lo convierte en legal…

Pero además circular por el arcén es peligroso por muchas razones. Está sucio y, por tanto, su adherencia es menor. Esa misma suciedad aumenta la posibilidad de pinchazo. Puedes encontrar vehículos parados ya que esa es la función y, además, los otros vehículos no se esperan que vayan a adelantarles por ahí. Por eso, si quieren orillarse cabe la posibilidad de que tan siquiera miren (aunque debieran) por el retrovisor. También si hay una salida o incorporación aparecerás en un punto en el que nadie te espera, y ya sabemos que eso no suele acabar bien.

Respetar la velocidad es una de las claves

Cuidado con los adelantamientos

No debería ni hacer falta decirlo, pero hay que tener mucha precaución a la hora de realizar adelantamientos. De entrada has de buscar el momento oportuno, obviamente esperar a que sea legal adelantar, y no tener prisa ni pegarte al vehículo a adelantar. Piensa que cuanto más te pegues menos visión tienes sobre lo que viene de frente.

El adelantamiento es un punto crítico y por eso hay que asegurarse de que tenemos tiempo para realizar la maniobra, buena visibilidad, que no viene un cruce o similares y, especialmente, prestar también atención al vehículo que vamos a adelantar. Si le vemos dubitativo, errante… mejor quedarse detrás y esperar porque puede que esté buscando algo y lleva a cabo un cambio de dirección imprevisto. Como siempre, el sentido común debe imperar.

Reduce la velocidad en poblaciones

Las señales y los límites de velocidad están para cumplirlos. Es cierto que hay algunos casos en los que son incomprensibles y da la sensación que están puestos para poder recaudar ¿quién no conoce un tramo de autopista que sin necesitada pasa de 120 a 100 durante 300 metros y justo hay un radar? Pero este no es el caso de las señalizaciones en poblaciones.

Siempre que te aproximes a una población debes extremar la precaución, y no solamente reducir la velocidad sino activar todas tus defensas de motero, y adoptar al máximo la premisa de la conducción defensiva. Puede cruzar alguien, que un coche salga tras una esquina o de un garaje… y ahí llega el desastre. Además, cuanto más rápido llegues menos tiempo para reaccionar tendrás tú y también la gente que esté en la población.

Ojo al rodar en grupo

Cuidado con los cruces

Da igual que tengas la preferencia, en un cruce siempre tienes las de perder si vas en moto. Es por eso que, al igual que en poblado, debes acercarte a la velocidad exigida por las señalizaciones y con todos tus sentidos centrados en lo que pasa en el cruce. Piensa que muchos coches, furgonetas y camiones tienen ángulos muertos por los que aunque miren, puede que no te vean si se da la fatídica circunstancia que tú estás en ese punto.

También debes tener en cuenta, especialmente en poblaciones más rurales, que la edad media de los conductores es mayor y sus reflejos puede que no estén en sus mejores momentos, e incluso que en situaciones delicadas se queden bloqueados. Así pues, paciencia, precaución y cero prisas. No hay nada que ganar y sí mucho que perder.

Nunca circules por encima de tus posibilidades

Este es uno de esos consejos que no deberían ni tener que darse, pero por desgracia hay muchos accidentes que suceden por ello, especialmente cuando se sale en grupo. La carretera no es un circuito y las salidas con los amigos no son carreras, son momentos y rutas para disfrutar con tranquilidad.

Queremos dar por hecho que vas a cumplir los límites de velocidad y es que, realmente, si los cumples a rajatabla las posibilidades de accidente disminuyen muchísimo. Pero incluso dentro de los límites legales puede que no te sientas cómodo, que vayas forzando en las curvas, en las zonas de frenada… Nadie conoce mejor su nivel que uno mismo, y es mejor descolgarse y quedarse atrás antes de una caída que, además, puede arrastrar también a alguien del grupo. De hecho ir rápido en carretera no significa ir rápido en circuito, además de que no sirve absolutamente para nada, porque al final, hay que esperar al último para tomar el aperitivo.

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