En una larga entrevista con el director técnico del equipo KTM de MotoGP, Sebastian Risse, SpeedWeek desvela algunas cosas internas del equipo y su perspectiva. KTM llegó a MotoGP en 2017, y el año pasado Pol Espargaró subió al podio en al última carrera (Valencia). Este año participan por primera vez con dos equipos y cuatro motos, las oficiales más las «satélite»: aunque el fichaje de Johann Zarco en el equipo oficial por ahora no ha traído resultados (aparte de una primera fila de parrilla) y parece que ya no tiene futuro, Pol Espargaró está casi siempre en la lucha entre los diez primeros y Miguel Oliveira ha conseguido ya algunos buenos resultados siendo su primer año en la categoría.
«Para nosotros 2019 es una temporada clave por varios motivos. El año pasado Pol tuvo varias lesiones que le impidieron trabajar, y los avances técnicos que hicimos en la moto tardaron en poderse probar bien. Seguimos trabajando durante el invierno y estamos viendo claros progresos. La moto todavía no está al nivel que nos gustaría, pero ha mejorado y es más fácil. Una buena carrera en 2018 nos metía entre los 10 primeros, y ahora Pol lucha con regularidad entre el 6º y 8º puestos. Y si se da mal, estamos entre los diez primeros. La mayoría de progresos son gracias al equipo de pruebas con Dani Pedrosa, y el equipo satélite se ha beneficiado de ello».
«Pero somos realistas y sabemos que cuando más te acercas a los líderes, más difícil es mejorar. Y tenemos pilotos con diferentes necesidades: Pol tiene su estilo, pero nos asegura buenos resultados. Pero necesitamos que los demás estén a gusto y mejoren. Miguel Oliveira es nuevo en MotoGP pero es muy abierto, se fija en los demás y sigue su línea: nos da buena información. Pero los que vienen de Yamaha (Zarco y Syahrin) tienen otro estilo, necesitan más información de la rueda delantera, y para ellos la KTM tiene más puntos débiles que para Pol por ejemplo que busca el máximo agarre detrás».
La ayuda de Dani Pedrosa parece que está siendo muy importante, en general para mejorar la moto y hacerla más fácil, pero también en la parte del motor. «Sabíamos que Dani ayudaría a hacer la moto más fácil, pero su ayuda es clave en la parte del motor y la electrónica. Tiene mucha más experiencia que nuestros pilotos, o el probador Mika Kallio. Todo lo que vamos probando y mejorando con Dani, lo vamos acumulando para pasarlo a los equipos como un paquete de mejoras. Cuando Dani da diez pasos, nuestros pilotos reciben una evolución: así vamos progresando durante la temporada, y el desarrollo de la moto nueva está básicamente en manos de Dani«.
