La estética de las motos de resistencia clásicas tiene sus adeptos, al igual que las maxinaked que a principios de los ’80 poblaban las parrillas de Superbikes. Y si no, que les pregunten a Wayne Rainey, Edddie Lawson o Wayne Gardner, que se batieron el cobre sobre manillares anchos antes de desembarcar en el Mundial de Velocidad. Combinar los dos mundos es posible a tenor del nuevo juguete de Brian.
El origen de esta preparación se inició con una batería de carburadores de competición Keihin CR29, por el simple hecho de darle “más chicha” a la Kawa. Pasado un tiempo, la moto requería de una nueva actualización y una cosa llevó a la otra. La óptica frontal y el semicarenado fueron el siguiente paso, con una pareja de faros tipo Cibie de LED siguiendo los consejos del especialista Daniel Stern Lighting. Tras seis meses de adquisiciones y pedidos en EE.UU, Alemania, Japón, Suecia y Reino Unido se compuso la máquina azul.
Depósito de gasolina con toma de llenado rápido doble, basculante reforzado/freno/llanta de Kawa ZXR1200, escape 4 en 1 Racefit con silencioso Supertrapp, horquilla invertida de ZXR750, frenos ISR con pinzas delanteras Tokico de 6 pistones, colín monoplaza con batería integrada, quilla, tapas de motor Moriwaki, cuentavueltas Stack de competición, interruptor de encendido tipo aviación en la tija, intermitentes testimoniales, radiador de aceite especial, cableado minimizado, adhesivos Z1 Gardner réplica, etc.
