La velocidad sigue siendo uno de los principales elementos por los que se produce el mayor número de accidentes de tráfico. Una velocidad excesiva o inadecuada es uno de los factores de riesgo fundamentales que determinan en mayor o menor medida la gravedad de las lesiones de las victimas en caso de accidente.
La Dirección General de Tráfico, DGT, puso en marcha una campaña de vigilancia y control de velocidad durante los días 17 y 23 de abril, coincidiendo con la Semana Santa. La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha controlado a 581.294 vehículos durante estos días.
Entre todos los conductores vigilados han resultado sancionados 31.096 por exceso de velocidad, lo que representa un 5,6 % de los vehículos controlados en carreteras convencionales y un 4,9 % en autopistas y autovías. De los conductores sancionados, cuatro han pasado a disposición judicial por exceder en más de 80 km/h la velocidad máxima permitida en la vía.
Este tipo de controles se han reforzado sobre todo en las carreteras convencionales, con un carril por sentido, dado que son las vías donde más accidentes de tráfico se producen al año. En este tipo de carreteras se ha detectado al 55,7 % de los infractores, 19.723 vehículos.
Desde la DGT se recuerda a los conductores que el incumplimiento* de estas normas de tráfico está recogido en el Código Penal como una infracción grave o muy grave por la que se puede llegar a recibir una sanción de entre 100 y 600 euros, e incluso penas de entre tres y seis meses de prisión, y la retirada del carné entre uno y cuatro años.
