Ya llevaba un tiempo creciendo, pero con la llegada de la pandemia el mundo del caravaning y las camper han ganado muchos adeptos. Si te gusta, porque no todo el mundo está preparado para ello, una autocaravana o una furgoneta camperizada de pueden dar muchas alegrías. El viaje más que nunca pasa a ser una parte indispensable y parar en cualquier punto del camino una realidad.
Es cierto que los que amamos las motos siempre hemos pensado en las caravanas o las autocaravanas como si fueran los motorhome de los pilotos. Así es como muchos pilotos llevaban y llevan su casa encima. Pero hay un paso más y es el de convertirla en tu hotel rodante, siempre con las vistas que tú quieres, siempre con el servicio de cocina abierto…
Pero las autocaravanas y las camper tienen un hándicap. Cuando llegas a un destino y más si estamos hablando de temporada alta, comenzar a moverse con ella para todos los sitios es un poco tedioso. Y mejor no hablar de intentar entrar en algunos pueblos con encanto con ellas, porque en muchos incluso está prohibido.
Entonces es cuando uno piensa en cómo conseguir los suministros necesarios. Ir a comprar el pan, agua, comida en general u otros elementos que necesites en tu día a día como campista. Algunos eligen las bicicletas, y la verdad es que no es una mala opción para recorridos pequeños, pero si se necesita recorrer más, una moto o un ciclomotor son una ayuda espectacular.
Y ahora es cuando llegamos hasta la Monkey, que es coprotagonista del vídeo que acompaña a este texto y que nos llega desde Japón gracias a Monkey Heaven. Como puedes ver en este caso, la camper es una Honda Kei, un vehículo tan pequeño que cada milímetro cuenta. Pues bien, la mejor manera de optimizar el espacio en este caso es la Honda Monkey. Una moto de 125 cc que permite moverse a una persona con soltura y conseguir traer al campamento base la lista de la compra.
Lo bueno de la Monkey es que bajando el manillar la altura total es de unos 775 milímetros, la del asiento y su largo es de tan solo 1,7 metros, con lo que pasa a ser una aliada perfecta. Y eso sin hablar que solamente consume 1,5 litros a los 100 kilómetros, con lo que llenando el depósito te da para ir a comprar el pan durante muchos, muchos días. Además, siempre se puede personalizar con alguna cesta o incluso maletas laterales y, entonces, nada podrá detenerte en tus escapadas.
